VA de VINOS e igualmente de las (famosas y siempre buscadas) AYUDAS al sector (¿estratégico?) del Turismo (¿y la hostelería?), es decir lo de la cigarra y la hormiga. Me refiero a lo que ocurre con la industria del turismo en España, que en mi opinión esta expresión de "industria del turismo", creo que no está bien utilizada, debido a que una industria según la RAE, es: (Del lat. industr?a). 1. f. Maña y destreza o artificio para hacer algo. 2. f. Conjunto de operaciones materiales ejecutadas para la obtención, transformación o transporte de uno o varios productos naturales. 3. f. Instalación destinada a estas operaciones. 4. f. Suma o conjunto de las industrias de un mismo o de varios géneros, de todo un país o de parte de él. La industria algodonera. La industria agrícola. La industria española. Por tanto, ya se parte de algo que no define bien el objeto u objetivo en cuestión, y el objetivo en cuestión es simplemente el turismo, y la RAE lo define así: (Del ingl. tourism). 1. m. Actividad o hecho de viajar por placer. 2. m. Conjunto de los medios conducentes a facilitar estos viajes. 3. m. Conjunto de personas que realiza este tipo de viajes. Por tanto, este aspecto tiene poco de transformación u obtención, de algo partiendo de productos naturales, etc. Pero esto no es lo malo aquí en España, realmente en España, pasa que todo el mundo empresarial, en estos tiempos de crisis perpetua, siempre dice que va a pasar hambre, pero la pregunta es: ¿Hambre de perder nutrientes y vitaminas para "su" vida? O quizá sea más bien ¿Hambre de no poder comprar ni mantener un porsche panamera y no querer tener un modesto skoda o dacia? Pero, como aquí en esta nueva sociedad criada en valores, no como antes que por lo visto éramos poco menos que bestias inmundas, pues eso, en estos tiempos llenos de derechos y disfrute, pero nada de obligaciones ni esfuerzo, todo el mundo pide ayudas, mejor aún exige ayudas; O sea, uno monta una empresa, y como no le salen "sus" números y los ejercicios anuales no le son rentables, por circunstancias mil, quiere que le salve su status y su forma de vida el «papá» estado, que para eso está. Pero cuando hace pocos años, un café o una caña de cerveza de media costaba 1,20 euros, que 20 años atrás (1998), costaban antes del euro, tan solo casi 0,40 céntimos. Es decir, qué en apenas 20 años, con ciertas crisis y sin pandemia (aún), la hostelería tradicional (parte importante del turismo) ha ido aumentando sus precios más de un 350%. Por ello creo personalmente, que durante esas dos décadas han podido, auto financiarse o crear reservas para posibles ejercicios completos de ganancia cero. Y así podría seguir mi reflexión, largo escrito, porque, en verdad un vino medio antes del euro costaba entre 0,60 y 0,80 euros, y ahora no se encuentra en ningún espacio hostelero y mal servido, por no menos de 2,50 euros; entones si no se ha guardado, el estado que somos todos, ¿Por qué tenemos que pagar sus malas gestiones empresariales? ¡Ah!, se de lo que hablo porque he tenido un negocio de hostelería durante veinte años.