Ignacio Ruiz

Cabalito

Ignacio Ruiz


A pan duro, diente agudo

20/11/2024

Así es como se está dirimiendo el presupuesto nacional en este país. Todo pinta de muy mal color. Hasta suplicando el beneplácito de las minorías, a cambio de contraprestaciones leoninas y antagónicas, en la Comisión de Hacienda en el Congreso de los Diputados. ¡Menudo carajal!
No tiene relación con la victoria de Trump, o las ganas de dejar el avispero revuelto de los demócratas en Estados Unidos, o puede ser que sí. No tiene que ver con el cambio climático, pero la falta de gestión preventiva y exceso de celo en favor de criterios ecologistas, se han demostrado contraproducentes con las medidas antrópicas que han propiciado que sobrevivamos frente a la violencia de la naturaleza durante muchos años. 
Tiene relación directa con las ganas de hacer demagogia y manipular del gobierno de Sánchez, aunque ello conlleve crear frentismo político con fallecidos de por medio. Con campañas orquestadas para acabar con Mazón en Valencia, cuando la gestión en Castilla-La Mancha fue, incluso, peor, sin alertas, sin prevención y con una ausencia añeja de inversión en el mantenimiento de los cauces por parte de las confederaciones hidrográficas y del gobierno regional.
Todo se está poniendo difícil, y no estamos en un momento en el que la actitud de los actores involucrados esté por la labor de utilizar la moderación. Sobra soberbia, malos modos y chulería en X (ex - Twitter) como la de Gutiérrez que vota contra los intereses económicos de la región pero se despacha contra los que se lo afeamos.
No puedo asumir, como otros, que el gobierno no esté ni se le espere para dar explicaciones, por dejadez o con mala intención. Aquí la inercia nos está llevando a una dejadez que ya conocimos con Barreda y, de esta guisa, no se puede invertir porque no hay guita, pero les vale con mantener el pesebre.
Y a perro flaco, todo son pulgas. Sin presupuestos nacionales, el tope de gasto para las comunidades autónomas es irreal, lo que se apruebe será un brindis al sol hasta donde se pueda, si es que se puede algo. Esto debería explotar por la mala gestión y el secuestro de las instituciones al que nos someten los independentistas y rupturistas y por Ábalos, Begoña, el hermano, las mascarillas, la Jeny, ¿será?