Al final llegó el tan ansiado 'playoff' de ascenso. Y, aunque somos muchos los que creíamos que con el proyecto actual se podía haber ganado la Liga y ascender directamente, nos tenemos que conformar con una fase de ascenso altamente complicada a la par que emocionante, y ojalá también larga en el tiempo.
Y, aunque el CD Toledo llega en un gran momento de forma, con cuatro victorias consecutivas y la sensación de que el dominio en el juego se traduce en goles, ya hemos comprobado este año como el halago debilita, y nadie te va a regalar nada, mucho menos un club centenario.
Es muy importante no equivocarse y confundir la fiesta que se vivió el domingo en Villarrubia de los Ojos sobre el césped por la clasificación para el 'play off' con una fiesta de ascenso y fin de temporada. No vale conformarse con aquello, y, para ello, creo que la verdadera temporada del CD Toledo empieza ahora.  
Y es que aunque esta clasificación ha sido como el cuento de las ovejas y el lobo, que por mucho que decíamos qué viene, qué viene, parecía que nunca terminaba de llegar por esa irregularidad y bajo rendimiento en momentos clave que no se pueden repetir.
Por esto, y por el sufrimiento de esta y las pasadas temporadas, el club, el equipo y la afición se merecen el mayor de los éxitos. Eso sí, ser favorito y llegar como llega el CD Toledo no te garantiza nada. Esto es fútbol y en una eliminatoria a doble partido, todo puede pasar.
Va a tocar luchar con uñas y dientes, primero esta eliminatoria contra el Yugo Socuéllamos, metiendo en la coctelera un muchito de ambición y ganas de superarse, cuarto y mitad de intensidad e inteligencia, y todo ello, finalmente, aderezado con la paciencia suficiente para saber leer e interpretar bien los momentos del juego.
Es el momento de no guardarse nada, de darlo todo en cada momento, de vaciarse y sentir el aliento de una afición que volverá a demostrar porqué es tan especial. De recordar que vienes de abajo y lo que ha costado estar aquí.  Y, si todo esto pasa, estoy seguro, sin ser para nada fácil, que el éxito estará más cerca.