El presidente y la vicepresidenta de Asaja de Castilla-La Mancha, José María Fresneda y Blanca Corroto, respectivamente, han criticado este miércoles la reducción de la jornada laboral que propugna la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a la que han definido como una "máquina de destruir".
En una rueda de prensa, y a preguntas de los periodistas sobre la reducción de la jornada laboral Fresneda ha considerado que Díaz "es una máquina de destruir y picar carne", mientras que a juicio de Corroto es "una thermomix".
Fresneda le ha reprochado que "no se atreve con las grandes multinacionales y con las grandes empresas", sino que con quien se atreve es "con un agricultor que lleva a dos trabajadores a recoger la aceituna o con una tienda que tiene otro".
"Es un atentado, es querer llevarnos a las mulas en el campo, es querer llevarnos a lo antiguo, a lo casposo, a lo que ya no vale para nada", ha aseverado Fresneda, que ha abogado por "dejar que los pequeños se entiendan con los trabajadores".
Según el presidente de Asaja de Castilla-La Mancha los "pequeños" son "la inmensa mayoría", el 90 por ciento de los agricultores y ganaderos "que ya tienen bastante porque no encuentran mano de obra, porque en los planes de empleo rural colocan a todo el mundo y no podemos acceder a que los trabajadores puedan estar con los agricultores haciendo sus cosas".
En sentido, ha manifestado que es un problema que está generando el Gobierno a los modelos productivos y "un atentado contra la gente que trabaja".
Campaña de la aceituna
Como ejemplo de la situación que se está generando, Corroto ha señalado que no se sabe cuándo va a poder terminar la campaña de la recogida de aceitunas en algunas zonas "porque no hay gente, no quieren venir a trabajar ni aunque haya subidas del salario mínimo interprofesional (SMI)".
Corroto ha recordado que Asaja consiguió que las personas que están cobrando una ayuda de 400 o 460 euros pudieran ser dadas de alta en la Seguridad Social en el desarrollo de las campañas de recolección y no las perdieran, pero no ha habido ninguna que se haya acogido a esta opción.
"Quieren reducir la jornada a 37 horas y media semanales pero ¿Qué vamos a hacer? ¿Dónde está la gente?" se ha preguntado la vicepresidenta de Asaja de Castilla-La Mancha, que ha advertido: "En esto vamos muy mal encaminados".