Los últimos datos sobre niveles de ruido en la plaza de Cuba han mejorado. ¿Creen desde la Asociación que debería suprimirse la protección acústica en la zona?

Una vez que hemos analizado los datos facilitados por el Ayuntamiento entendemos, con honestidad y sin ningún tipo de agresividad hacia los vecinos, que ya no hay ninguna razón para mantener la limitación que supone una zona de protección acústica en la plaza de Cuba.

Este barrio es como cualquier otro, machacado por la crisis; un barrio que no tiene nada que ver con lo que fue, en el que cualquiera que se pasee por allí puede ver cómo se están cerrando locales y cómo se ha ido perdiendo esa tensión vital y comercial que había en el barrio. Entendemos que seguir manteniendo la zona de protección acústica no tiene sentido.

Seguimos en conversaciones con el Ayuntamiento, con el que ya hemos mantenido algún contacto, para ver las posibilidades de que esa zona de protección se levante. No para poblar otra vez el barrio con 25 bares más, sino que levantar la zona de protección acústica significaría para muchos hosteleros el poder tener una marquesina en las mismas condiciones que el bar que tienen a 30 metros.

Terrazas y marquesinas ¿pueden ser una tabla de salvación para algunos establecimientos?

Hoy en día una marquesina o una terraza supone para muchos una vida que puede salvar un negocio, aunque siempre dentro de los límites de convivencia con los vecinos.

No estamos planteando que se proteja a los empresarios en detrimento de los vecinos. Creemos que hay una frontera de convivencia posible entre empresarios y vecinos, que permita dotar al barrio de una vida que beneficie a todos.

Lamentablemente algunos de los vecinos ven esto como una agresión, pero no se puede mantener eternamente una zona de protección acústica cuando los niveles de ruido están como están. Hay un hecho constatable,  los niveles de contaminación acústica han bajado y han ido bajando paulatinamente hasta llegar a unos límites en los que son perfectamente comparables a los de otro barrio de la ciudad.

Hay que pensar que un hostelero de la plaza de Cuba es tan hostelero, y tiene tantos derechos, como otro del barrio  de Santa Bárbara. Vamos a seguir trabajando y hablando con el Ayuntamiento, e incluso con los vecinos, para ver la posibilidad de levantar la zona de protección acústica o relajar esa protección que impide muchas veces el desarrollo de un negocio con normalidad.

En otro orden de cosas, el paseo de la Vega parece perfilarse de nuevo como recinto ferial. Adelantaba esta intención hace unos meses el alcalde de Toledo, y este Corpus se convertía ya en escenario de dos grandes conciertos. ¿Qué le parece la propuesta? ¿Puede afectar de algún modo al sector?

No tenemos una opinión formada al respecto. Son muchos colectivos los que pretenden que el recinto vuelva a la Vega, pero primero tiene que encajar. En cuanto a servicios y transportes, que duda cabe que está más cerca del Casco que otras zonas.

En principio el Ayuntamiento tuvo la intención de trasladar el recinto a otra zona de la ciudad, al final está ahí en la Peraleda, donde hay pendiente una actuación urbanística, por lo que hay buscar ubicaciones distintas.

Si estos conciertos en la Vega querían ser una especie de ensayo a ver qué tal, no sé. El principio fundamental es que encaje, que tenga tamaño suficiente para que todo lo que son atracciones y actividades esté ahí. No sé si el alcalde tendrá intención seria de trasladarlo a la Vega, no tenemos noticias, por eso no nos hemos parado a estudiar qué significaría ese cambio del ferial.