El Ayuntamiento de Toledo se verá obligado a acometer una revisión al alza de las tarifas del agua para el quinquenio actual (2020-2024) después de incumplir una sentencia fechada en el pasado día 17 de enero. A esta información publicada por La Tribuna, ya hay respuesta oficial por parte del equipo de gobierno. La concejala de Obras y Servicios, Loreto Molina, ha selado que «debido a que el gobierno anterior del PSOE no llevó a cabo una revisión de precios que tenía que haberse realizado en el año 2019», ahora ellos deben ejecutarla en un plazo de diez días hábiles.

La edil del Partido Popular reconoció que aún están trabajando en la «fórmula» a adoptar para acatar la sentencia y «encajarla en los recibos». En este sentido, Molina tampoco supo concretar en cuánto se traducirá el incremento económico en los facturas de los ciudadanos toledanos, pero dijo que están en contacto con la empresa concesionaria -Tagus- para conocer los detalles cuanto antes y poder hacerlo público en cuanto sea posible. Las estimaciones realizadas por las fuentes consultadas por La Tribuna en la información previa a esta reacción del Consistorio apuntan que para una familia tipo el incremento rondaría los tres euros. Más amplia sería la cantidad a abonar por parte de la empresas intensivas del consumo de agua.

Como se ha citado anteriormente, el Ayuntamiento cuenta con 10 días hábiles improrrogables desde que recibió el auto para acatar la sentencia. En el caso de producirse un nuevo incumplimiento, los responsables se enfrentarían a sanciones que oscilarían entre los 150 y los 1.500 euros.

Loreto Molina ha destacado que se trata de una sentencia que «claramente sabían y conocían» en el Grupo Municipal Socialista, así como los integrantes del anterior equipo de gobierno y «lo tenían que haber trabajado y hecho ellos», pero recalcó que «no sólo ahora tras la sentencia, sino que deberían haber hecho una revisión de precios años atrás y tampoco lo hicieron».

Molina, por tanto, fue clara cuando vinculó esta inacción socialista con la situación actual, ya que «ahora nos vemos obligados a hacer una revisión al alza que repercutirá en los ciudadanos».

De igual manera, la edil de Obras y Servicios recordó que no sólo serán los vecinos quiénes sufran el incremento de los precios en su factura del agua, sino que también lo notarán empresas o entidades que colaboran con el Ayuntamiento.