El entrenador del Baloncesto Talavera, Ricardo Úriz, ha reconocido que en esta competición en LEB Plata «la primera vuelta está siendo dura». Aunque considera que «el equipo va entendiendo poco a poco lo que es esta competición y vamos adquiriendo esa experiencia». Su escuadra es, de momento, penúltima en el Grupo Oeste.
El conjunto talaverano prepara el próximo choque que le llevará a la pista de un rival directo, Zamora Enamora. Será el enfrentamiento que cierre la decimotercera jornada y se disputará el día 30 a las 20,00 horas en el pabellón Ángel Nieto. Los talaveranos buscarán la primera victoria lejos del Primero de Mayo. El técnico ha señalado de su adversario en la última jornada de 2022 que «no empezó muy bien, pero encadenó tres partidos seguidos y ha podido salir de la zona de descenso». Está convencido de que «va a ser un partido importante, no solo para nosotros, sino también para ellos».
Los talaveranos afrontarán este encuentro en Zamora tras perder en casa por 74-79 ante Navarra. Hay que resaltar que el equipo jugó este encuentro con la baja de Andrejevic quien viajó a Serbia «por tema de visado», apuntó Úriz. Por su parte, Cooper tuvo una presencia testimonial en el primer tiempo y más minutos en el segundo; se debió a que el jugador «está con problemas físicos; no pudo terminar el partido anterior en Ponferrada. Estamos intentando recuperarle de la mejor manera posible». Es indudable que «es un jugador importante para nosotros»; quiere resaltar que «ha jugado con molestias, pero ha querido hacer el esfuerzo por estar con sus compañeros».
En este sentido, el técnico reconoce ante este choque «íbamos un poco justos»; aunque valoró que se demostró una vez más que «el equipo tiene corazón, pelea y que puede hacer mejor o peor las cosas, pero da siempre el do de pecho». Por todo ello, «estoy orgulloso por todo el esfuerzo que han hecho los jugadores». Quiere dejar claro que «si hubiéramos ganado, el mensaje sería el mismo»; aunque es un hecho que «el resultado marca en el mundo profesional».
El Baloncesto Talavera fue a remolque en el marcador, pero casi siempre muy cerca de Navarra. Curioso que cuando los de Úriz hacían el esfuerzo de aproximarse, ocurría alguna circunstancia que les impedía ponerse por delante. El técnico tiene detectada la causa y es que «esto sucede en dinámicas negativas; veníamos de tres derrotas seguidas y una acción en concreto, puede ser una falta, un rebote o un detalle, te sale al revés».
Partido especial. Por otro lado, Ricardo Úriz recibió en el Primero de Mayo a un equipo de su tierra; explicó que «es la primera vez que me enfrento a ellos; se me hizo raro ver el escudo de la ciudad donde nací». Tiene muy claro que el encuentro en el feudo navarro «será más especial por volver a la pista donde he jugado durante muchos años». Eso sí, «una vez que empieza el partido, no me fijo en el escudo, ni en la procedencia, sino que intento que mi equipo compita y que gane el encuentro».
En otro orden de cosas, ha pedido precaución en la carretera en esta fechas con mayor número de desplazamientos: «Creo que todos nos jugamos mucho; estamos hablando de algo serio y quiero hacer un llamamiento a la responsabilidad». Y es que hay que recordar que la expedición talaverana sufrió un accidente en la A-5 a la vuelta de Ponferrada cuando un turismo en dirección contraria impactó contra el autobús en el que viajaba: «Gracias a Dios fue un susto, pero pudo haber sido algo más».
La escuadra talaverana no tendrá muchas vacaciones en estas fechas dado que la competición no tiene parón: «No hay mucho tiempo para poder descansar o pasar tiempo con la familia; es así y nos tenemos que adaptar al calendario».
Y transmitió sus mejores deseos navideños a los seguidores: «Quiero enviar un mensaje a toda esa gente que viene a apoyarnos porque me hace especial ilusión que acudan tantos espectadores y que, a pesar de los pesares, estén con el equipo; esto significa mucho para nosotros». Por ello, «en nombre todos les quiero felicitar la Navidad y que nos veremos el año que viene».