Austeridad, estabilidad presupuestaria y reducción de deuda. Estos han sido algunos de los ejes que han marcado la elaboración de los presupuestos de la Corporación provincial para el 2014 y que ayer fueron analizados en la primera Comisión Informativa de Hacienda que se celebró en el Palacio Provincial y que tendrá continuidad «en tantas comisiones» como solicite la oposición antes del día del Pleno.

Así lo aseguraba el diputado de Hacienda, Juan José Gómez-Hidalgo, antes de adentrarse en el análisis de las cifras que revelan, entre otras cuestiones, un presupuesto de 134.166.654 euros de ingresos consolidados con un techo de gasto «ligeramente inferior», ya que se ha visto mermado hasta los 124,2 millones de euros.

Ahora bien, una de las características de las cuentas provinciales para el próximo año es que «no acudiremos a financiación ajena, es decir nuevos préstamos» para financiar las inversiones.  Además, y es el segundo año consecutivo, remarcaba el diputado provincial,  la Corporación provincial reduce su deuda, «vamos a liquidar préstamos por importe de 10.785.924 euros», una rebaja del endeudamiento que supone el 8% del presupuesto de 2014.

Y en esta reducción del endeudamiento se produce una consecuente merma, y muy «sustancial», de un 28%, de los gastos financieros o intereses que generan los préstamos, para los que en el próximo ejercicio (Capítulo III) se han consignado 1.135.000 euros (un 1% del prepuesto).

En esta materia, según resaltó Gómez-Hidalgo, Diputación consigue así reducir su deuda viva financiera a final de 2014 hasta los 57 millones. Es decir se rebaja en un 15,86% ya que se parte de 67 millones en la actualidad.

Por otro lado, y como es habitual los capítulos de transferencias corrientes y personal son los que se ‘comen’ la mayor parte de los recursos económicos de la administración provincial, para el próximo ejercicio el 36 y el 25% respectivamente. Ambos capítulos se mantienen en parecidos números al año pasado.

Así, en transferencias corrientes se ha marcado un presupuesto de 45.007.183 euros, de los que algo más de 12 millones van para gasto corriente de los ayuntamientos, 2 millones para el Organismo  Autónomo Provincial de Gestión Tributaria, 263.000 euros para la Agencia Provincial de Energía, y 16.370.000 euros es lo que se va a transferir a la Junta por el Hospital Provincial (10 millones procedentes del Fondo de Asistencia Sanitaria del Estado y 5,7 del coste de la transferencia). Además, se consignan en este capítulo 3,3 millones para el Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales y 6,7 al Consorcio de Bomberos. Por último, 3,5 millones se destinan a subvenciones a instituciones sin ánimo de lucro.

inversiones.  Pero si hay un capítulo que interesa conocer en profundidad ese es el de las Inversiones (VI y VII). Es aquí, donde se muestra si una administración está  preparada para afrontar un nuevo año con visión de futuro o tiene que replegarse y mantenerse en reserva para mejores ocasiones.

En este apartado, Gómez-Hidalgo resaltó un ligero crecimiento de un 4,5% en el capítulo de inversiones propias de la Corporación provincial (VI), que dotan con 11.005.575 euros (el 8% del presupuesto). La mayor parte, 7,9 millones, se invertirán en mantenimiento de carreteras, y más de 1,3 millones en centros propios -edificios y otras construcciones que el presupuesto de 2013 contabilizaba con 1,2 millones-.

Ahora bien, es el Capítulo VII  -Transferencias de capital- del que están muy pendientes todos los pueblos de la provincia porque aquí es donde se consignan los Planes Provinciales, y las actuaciones en infraestructuras rurales y urbanas. Este capítulo tiene un presupuesto de casi 12,4 millones (el 9% presupuesto) y la mayor partida -8,1 millones- se dirigen a los Planes Provinciales -ya repartidos- y 2,3 para infraestructuras rurales y urbanas. También se incluyen 250.000 euros para los convenios de las casas cuartel, que crecen 50.000 euros, y 200.000 euros para ayudar a la construcción del Ayuntamiento de Méntrida.

Goméz-Hidalgo destacó el esfuerzo «que hace esta casa para mantener el empleo» pero también las inversiones y las cifras para gasto corriente, que «es una de nuestras señas de identidad; ayudar a los ayuntamientos en su tesorería para poder financiar facturas».