Después de un verano más largo de lo habitual, la espera ha llegado a su fin. Amenizado por los rumores y fichajes, primero, y por la pretemporada y sus encuentros, trofeos de ferias y tandas de penaltis, después, ha entretenido por momentos a la afición verdiblanca, que espera que este año se consiga el tan ansiado objetivo del ascenso.
Decía Albert Einstein que «locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener resultados diferentes», y parece que haciendo un guiño a uno de los genios de nuestra historia, el CD Toledo ha buscado cambiar la manera de hacer las cosas para obtener los resultados esperados alejándose de enajenaciones transitorias pasadas.
Y no parece que, adaptarse, mutar y cambiar, sea algo insensato en un mundo actual donde la velocidad y lo urgente de todo lo que nos rodea es tan rápido como imprevisible. Metamorfosis que podemos apreciar en diferentes ámbitos del club.
Cambios en la manera de proceder con el inquilino del banquillo, renovando, este año sí, a un entrenador que, a pesar de no conseguir el objetivo inicial del club, cumple con creces la tarea para la que realmente vino.
Cambios en la conformación de la dirección deportiva, dejando atrás modelos incomprensibles y actuando con sentido común y trabajo en equipo. El fútbol no podemos olvidar que es un deporte de equipo que debe trasladar esta manera de trabajar a todos sus ámbitos.
Cambios en la formación de una plantilla que busca equilibrios fundamentales no solo entre sus líneas, sino en otros aspectos como la renovación parcial de sus jugadores, la duplicidad de puestos, la siempre interesante mezcla de experiencia y juventud.
Cambios en la duración y estructuración de una pretemporada que, aunque ha contado con algún lujo tipo concentración, que seguro que viene a sumar, me ha parecido sensata y realista.
Cambios en la innovadora presentación de las equipaciones, acercándose a aficionados y sponsors, y cambios y más cambios...
Y, por no dejar de rizar el rizo, hasta cambios en los resultados de la pretemporada con marcadores menos favorables en partidos intrascendentes donde lo importante son otros aspectos que te lleven a la victoria en los partidos realmente trascendentes, los de la Liga.
Ahora sí, antes de concluir, que a nadie se le olvide que esto es fútbol, y todos estos cambios que buscan lo mejor es de todos sabido que no pueden garantizar nada en este deporte.