En una semana en la que todos los amantes del deporte aún tenemos encogido y emocionado, a más no poder, el corazón por la retirada de, para mí, el mejor deportista español de todos los tiempos, su incombustible ejemplo creo que nos sirve para la actual situación que está viviendo el CD Toledo.
Quizás, sea un disparate comparar a Rafa Nadal con el CD Toledo, pero mi propósito hoy no es hacer tal comparativa, todo lo contrario. Mi objetivo a día de hoy es que alguna parte de su increíble legado nos sirva a todos de aprendizaje. Hay mucho en lo que fijarse en él.
Los deportistas analizamos deporte, deportistas, y creo que el CD Toledo puede coger muchos de los mensajes que lanzó durante toda su carrera, y nos resumió el pasado martes Rafa Nadal en su despedida; unión, continuidad, perseverancia, superación… y que son parte de su ADN, un ADN que nos ha hecho vibrar y vibrar tanto a todos.
Quizás, hoy y para siempre, Rafa Nadal es lo que es por cómo se ha sobrepuesto siempre a sus dificultades en busca del éxito, y lo ha hecho siempre con humildad, trabajo, ganas de crecer y respeto a sí mismo, al rival y a su deporte.
El CD Toledo actual, que viene de donde todos sabemos, nos ha ilusionado con un arranque de liga fabuloso, pero como el mejor de los deportistas, pasará esta temporada por momentos difíciles como el actual, pero aquí es donde ese ejemplo debe ser capaz de iluminar el camino para encontrar la unión, la confianza y la creencia en crecer para seguir.
Estaréis seguro de acuerdo, en que Rafa Nadal, un deportista inigualable, sobre todo, nos ha emocionado a todos como nadie, y, aunque será algo irrepetible, nos deja esa mentalidad ganadora, de no rendirse, de luchar hasta el final, de competir al máximo... y esa huella es transferible a toda nuestra sociedad, es 100% útil, por supuesto, para el CD Toledo y todo su entorno.
Estamos hablando de un proyecto, vida, carrera deportiva que se cierra, que acaba y que será infinito, con otro enfrente, que quiere, salvando las distancias, ojalá acercarse de lejos. 
Soñar es gratis, y el deporte nos hace soñar por su épica y grandeza, por jugar con nuestras ilusiones. Y ahora que dejamos de soñar e ilusionarnos con Rafa Nadal, por qué no empezar a soñar de verdad con el CD Toledo.