Melina Mercouri fue una gran actriz y cantante griega que se convirtió, en 1981, en la primera mujer ministra de Cultura de su país. Ella propuso el proyecto de establecer la Capital Europea de la Cultura, idea que prosperó, logrando que Atenas fuera elegida la primera Capital Europea de la Cultura en 1985. Fue beligerante en el terreno de lograr recuperar para Grecia los tesoros griegos que, bajo el nombre de los Mármoles de Elgin, se encuentran en el Museo Británico y que Thomas Bruce, conde de Elgin se llevó de la Acrópolis de Atenas en el siglo XIX. Sus gestiones no prosperaron, pero abrió un debate sobre la necesidad de plantear donde se ubican las piezas que se trasladaron de sus lugares de origen a determinados Museos, polémica que tiene muchos puntos de vista y que, en general, no aporta soluciones únicas que se puedan aplicar sin excepción. Una buena idea de cómo resolver la exposición de las mejores piezas de la Acrópolis de Atenas, fue llevar a cabo la construcción de un nuevo Museo. Este se construyó a los pies de la Acrópolis con un coste de 129 millones de euros financiado por el gobierno griego y con Fondos de la Unión Europea. En el mismo se han depositado piezas retiradas de la Acrópolis, así como otras que estaban en el Museo Arqueológico Regional Antonio Salinas de Palermo, los Museos Vaticanos y el Museo de la Universidad de Heidelberg que sí han sido restituidas a Grecia. 
En España tenemos un nuevo ministro de Cultura, Ernest Urtasun Domenech, que ha hecho unas curiosas declaraciones sobre cómo se debe cambiar el discurso de las colecciones que se exponen en los Museos estatales, para eliminar su sesgo «etnocentrista», así como «descolonizarlas». Demuestra que es buen alumno del Franquismo que se inventaba un enemigo exterior para distraer sobre los problemas reales que España tenía. Al «Gibraltar español» de Franco, Ernest Urtasun lo sustituye por lo de la «descolonización». ¿Por qué no plantea los verdaderos problemas de los Museos estatales? Falta de personal, pocos recursos, ejecución deficiente de obras de mantenimiento. 
Por favor, dedíquese a gestionar bien lo que debe, en lugar de inventarse 'enemigos exteriores'. Si Melina Mercouri levantara la cabeza, se avergonzaría de esta nueva izquierda sin rumbo que tenemos ahora. Yo, como toledano, me encantaría que gestionara la devolución a Toledo de los cuadros de el Greco que están desperdigados por el mundo. Pero debe ser que esto no toca.