Miguel Ángel Dionisio

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Miguel Ángel Dionisio


Al-Idrisi en Talavera

27/11/2024

Hace unos días se inauguraba en Talavera un monumento en cerámica recordando el trabajo del geógrafo ceutí al-Idrisi, quien, en el siglo XII, por mandato del rey de Sicilia, el normando Roger II, realizó un sumario geográfico del mundo conocido, y para ello se dedicó a viajar durante quince años. En sus viajes incluyó la península ibérica, confeccionando un mapa que publicó en su obra. Dicho mapa, junto con la descripción que hizo de Talavera, es el que se ha representado en la escultura en forma de libro, que se complementa con otro panel de cerámica, instalado en la muralla, en el que acompañando la efigie del geógrafo, se reproduce la misma descripción. Lo curioso del mapa, y que tenía desconcertados a quienes se acercaban a contemplarlo, es que está invertido, con el Sur en la parte superior y el Norte en la inferior.
El texto nos da una imagen de cómo era la ciudad a mediados de la duodécima centuria, señalando que poseía un castillo perfectamente fortificado, era notable por su belleza –obviamente ante de los desaguisados urbanísticos de la contemporaneidad-, así como por la extensión y la variedad de sus producciones. Indicaba que los bazares eran dignos de verse y cómo las casas estaban agradablemente dispuestas, mientras que a orillas del Tajo se elevaban gran número de molinos. Capital de una importante provincia, rodeada de campos fértiles, podían encontrarse monumentos de remota antigüedad. Una descripción que nos hace lamentar la pérdida que ha sufrido la ciudad de parte de su antiguo patrimonio, un lamento extensible, por otro lado, a muchos de nuestros pueblos y ciudades, sacrificados en aras de un mal entendido progreso.
De la vida de al-Idrisi sabemos en realidad muy poco. Nacido –aunque algunos ponen en duda este dato- en Ceuta, en torno al año 1100, descendía del rey taifa de Málaga Idris II. Su muerte se sitúa alrededor del 1165 o 1166. Llamado por el soberano normando de Sicilia, se estableció en Palermo, y con su patrocinio pudo redactar la obra por la que ha pasado a la posteridad, el Kit?b  nuzhat al-mušt?q f? ?tir?q al-?f?q ('El libro del deleite del ansioso por traspasar los horizontes'), más conocido como Kit?b Ru??r ('El libro de Roger').  Además de este libro, escribió un tratado sobre medicina.
A pesar de algunos errores, la obra de al-Idrisi es de tal magnitud que le ha convertido en uno de los más importantes geógrafos y cartógrafos de la Edad Media. Es también reflejo de la cosmopolita corte de Palermo, donde se daban cita la cultura árabe, la normanda y la bizantina –en la iglesia palermitana de la Martorana se puede contemplar un mosaico que representa a Roger II vestido como un emperador bizantino en el momento en que Cristo le corona-. Al-Idrisi sufrió un injusto olvido, que la iniciativa talaverana viene a reparar.
¡Ah! y como buen medieval, creía que la tierra era redonda.