El alcalde de Fuensalida, José Jaime Alonso, ha solicitado públicamente al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, la supresión del canon del agua, un nuevo impuesto que afecta a todos los castellanomanchegos y, en particular, a los vecinos de Fuensalida.

En declaraciones a los medios, Alonso ha expresado su preocupación sobre las razones detrás de la creación de este nuevo tributo, cuestionando si realmente servirá para mejorar el servicio de agua potable o el abastecimiento en la región. "Por lo que he sabido, no va a ser así", ha afirmado el alcalde, quien duda que el impuesto vaya a beneficiar a la ciudadanía.

El canon, según Alonso, es un impuesto recaudatorio que solo repercute en la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y que, en lugar de mejorar los servicios, pondrá una carga económica adicional sobre los ciudadanos. "Este impuesto termina metiendo la mano en el bolsillo de los fuensalidanos dos veces: un impuesto fijo y otro variable. Además, se les obligará a pagar por las fugas que puedan ocurrir o por el agua de las fuentes públicas. Cada vez que un niño termine de jugar al baloncesto y se duche, lo pagaremos todos", ha afirmado Alonso.

Según el alcalde, los vecinos se preguntan por qué se les cobra más por lo mismo, y su respuesta es clara: "Este impuesto no tiene sentido. Es puramente recaudatorio y perjudica a los ciudadanos de Fuensalida y de toda Castilla-La Mancha".

Alonso ha destacado también los problemas económicos a los que se enfrentan los ayuntamientos. "Tenemos un grave problema económico en los municipios, y estamos siendo incapaces de contar con el apoyo de una administración regional que colabore con nosotros. Es inaudito lo que estamos viviendo los alcaldes y los gobiernos municipales con una administración regional que no quiere colaborar", ha dicho.

El alcalde ha dejado claro que si el impuesto estuviera destinado a ayudar a los ayuntamientos a cubrir las necesidades y renovar las infraestructuras, podría entenderse, pero no pueden aceptar que se cobre por un servicio que ya se ofrece.

En cuanto a las preguntas de los medios, Alonso ha asegurado que el Ayuntamiento de Fuensalida está estudiando todas las medidas políticas y judiciales para luchar contra este nuevo impuesto. "Page está cometiendo un error, perjudicando a todos sus vecinos. Este impuesto no beneficia a nadie", ha remarcado. Asimismo, ha señalado que la subida de impuestos, como los de agua y basura, ha sido aplicada tanto por alcaldes del PP como del PSOE, y que esto está afectando gravemente a la economía de los municipios.

El sistema de abastecimiento mixto que usan en Fuensalida, que incluye agua propia y agua de Picadas (mucho más cara), también se verá afectado por este nuevo canon, ya que ahora se exige un consumo mínimo de agua de Picadas, incluso si no se usa. Este gasto adicional recaerá sobre el Ayuntamiento cada mes, lo que incrementará aún más las facturas de los vecinos.

Alonso ha añadido que más del 50% del agua facturada se pierde debido al estado de las infraestructuras, lo que ha llevado a un aumento de más del 50% en las facturas.