La semana pasada se aprobó un nuevo trasvase de 38 hectómetros cúbicos, correspondiente al mes de mayo. ¿Será el último de este volumen? En estos momentos hay un cambio normativo pendiente de publicación que reduciría esa cantidad a 27 hectómetros cúbicos mensuales cuando los embalses estén en nivel 2, que es la situación actual. El consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, espera que esa modificación entre en vigor pronto. "Espero que para el próximo mes esté publicado el Real Decreto", ha declarado esta mañana.
Lo define como un "cambio de registro" que en la práctica se traducirá en 11 hectómetros cúbicos que se quedarán en Entrepeñas y Buendía cada mes. Dice que "es un paso muy importante, pero no suficiente". Arroyo destaca que no es una decisión por "capricho político", sino que se sigue un criterio técnico. Es más, recuerda que lo mismo se propuso cuando el ministro de Agricultura era Arias Cañete, del PP, y que entonces se hizo "oídos sordos".
El consejero castellano-manchego ha anunciado también hoy que el Consejo de Gobierno ha decidido recurrir los trasvases de diciembre y enero, de 17 hectómetros cúbicos cada uno. Es lo que viene haciendo el Ejecutivo cada vez que en esas derivaciones de agua hay hectómetros cúbicos reservados para el regadío, como fue el caso. En ambos meses la Comisión de Explotación del Tajo-Segura pidió 20 hectómetros cúbicos, que es el máximo que se puede trasvasar con los embalses en nivel 3, pero el Ministerio rebajó su petición en tres hectómetros cúbicos.
En estos momentos en los embalses de cabecera hay 839 hectómetros cúbicos según indica el SAIH del Tajo (Sistema Automatizado de Información Hidrológica). Arroyo considera que la cabecera del Tajo va a continuar durante unos meses en nivel 2. Recuerda que además del último trasvase aprobado en mayo, todavía quedan hectómetros cúbicos pendientes de enviar de todas las autorizaciones que se dieron cuando el canal estaba en obras y que no se pudieron mandar al Levante en su momento.