Protesta del vacuno de leche en Talavera el 7 de septiembre

Lola Morán Fdez.
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El acto reivindicativo tiene como finalidad exigir precios justos puesto que ahora están por debajo de los costes de producción y sufren pérdidas de 3 a 5 céntimos por litro de leche

Protesta del vacuno de leche en Talavera el 7 de septiembre - Foto: Manu Reino

Los ganaderos del vacuno de leche ha convocado una concentración de protesta el próximo 7 de septiembre en Talavera para reivindicar precios justos para el sector. Se trata de una iniciativa convocada por los sindicatos ASAJA y UPA de la mano del conjunto de ganaderos de la comarca, que se sitúa en la línea de las anunciadas a nivel estatal por una situación que se repite de forma generalizada en todo el país, tal y como confirmó a La Tribuna el presidente de la Asociación Frisona de Castilla-La Mancha (Africama) y socio de la cooperativa San Francisco de Asís de Talavera La Nueva, José María Miguel. 

Este ganadero denunció que si bien el problema de los precios se arrastra desde hace tiempo, «se viene empeorando cada vez más porque no se pone remedio a la situación» y en el último año se ha agravado de manera considerable. Esta circunstancia, como explicó Miguel, está motivada ante todo por la subida de los costes de producción, con un «aumento sin precedentes de los costes de alimentación».

El representante de Africama expuso que se están llevando a cabo numerosas manifestaciones del sector lácteo por este motivo, algo a lo que no escapan Talavera y comarca, por lo que se ha decidido «salir a protestar porque la situación es insostenible y no se pone remedio». Sobre esto último, el ganadero reprochó que tanto la industria como la distribución «no están repercutiendo esa subida de  costes de producción al ganadero», lo que supone «una falta de rentabilidad brutal de un mes tras otro».

«Llega un momento en el que ya no se puede más», lamentó Miguel, quien apuntó en este sentido que se están produciendo cierres de granjas de forma «acelerada» en los últimos meses. Así, expuso que mientras hace cuatro años el número de granjas con entrega de leche en Castilla-La Mancha ascendía a unas 200, ahora son unas 160. «Estamos hablando de que vienen cerrando unas diez granjas al año, un porcentaje con el que en diez o doce años ha desaparecido por completo el ganado vacuno en Castilla-La Mancha y sobre todo en la comarca de Talavera, que es donde se encuentra entre el 70 y el 80% de todas las granjas de la región», manifestó, para añadir que, a nivel nacional, a diario se cierran entre dos y tres granjas, un dato «alarmante».

Al «no haber un abismo de que esto se solucione», los profesionales del sector han dicho «basta ya» y han convocado movilizaciones a nivel estatal en ciudades como Talavera. «Vamos a salir a protestar de manera conjunta todos el 7 de septiembre», jornada en la que se concentrarán a las 11 de la mañana ante el supermercado Carrefour «para hacer ver a la sociedad y a la distribución, a la industria y a las administraciones» la situación y «que tomen medidas y cambien el rumbo de la situación».

Será «una protesta pacífica, con pancartas y reivindicaciones» en la cual los ganaderos entregarán leche a los asistentes con el eslogan ‘Con la leche al cuello’. Se prevé la participación de unos 150 ganaderos, quienes animan a asistir a todos los profesionales ligados de manera directa o indirecta a este oficio. «Vamos todos en la misma dirección y en el mismo barco», expuso Miguel.

Sin relevo generacional. Este factor agrava el problema de la despoblación y la falta de relevo generacional que hay en esta profesión, desde la cual consideran que «se han traspasado ya las líneas rojas por las que se podría pasar». Así, mientras los costes de producción oscilan entre 0,36 y 0,39 euros, el ganadero recibe por litro de leche una media de 0,33 euros, según indicó Miguel, destacando la «brecha muy grande» entre ambas cifras, algo que «ya no puede soportar» el ganadero «un mes tras otro y tras otro».

Sobre esta cuestión, el representante del sector denunció el incumplimiento retirado de la Ley de la Cadena Alimentaria «por parte de la distribución con la complicidad de la industria». Como recordó, la ley establece que cada operador de la cadena alimentaria debe pagar al operador inmediatamente anterior un precio igual o superior al coste efectivo de producción, lo que implica que los precios se fijen de abajo hacia arriba «para que el valor sea lo más justo posible, y no al contrario como se está haciendo ahora».

«Es una posición de dominio y de abuso sin precedentes por parte de la industria y la distribución» hacia los ganaderos, que se ve apoyada además en el hecho de que se trata de un producto perecedero que no se puede almacenar mucho tiempo.

Todo ello ha llevado a ser un sector «endeudado, que se financia con créditos y pólizas» tras «meses a pérdidas». Por ello, hacen un llamamiento también a las administraciones para «hacer que se cumpla la ley» puesto que «no se están poniendo las herramientas adecuadas para que se cumpla».

Además de la subida de los costes de alimentación, se suma la del precio de la luz y el del gasóleo, entre otros, que llevan al sector a unas pérdidas de entre 3 y 5 céntimos de euro por litro de leche desde hace más de un año.

Con estos datos, muchas de las granjas que aún permanecen en activo en estos momentos lo hacen «porque tienen un endeudamiento brutal y no tienen más remedio, estirando la goma hasta donde ya no se puede más».