Aitor ya había coincidido con Rubén Lozano en el instituto, durante su etapa de la ESO. Ahora, gracias a las becas, esta vez ha trabajado tres meses con él en el Patronato Deportivo Municipal, y el concejal de Deportes ha explicado que «para mí, Aitor ha sido un ejemplo de inserción laboral, de integración plena en el Patronato». Su ejemplo demuestra que la ESO «tiene una pasarela, y gracias a Plena Inclusión y esfuerzo de todos, hacia la inserción laboral». De ahí que entienda que «este es el trabajo diario que debemos tener».
Elísabeth de la Peña (Apanas), Aitor Martínez (Afannes) y Ana Heras, (Down Toledo) acababan de terminar sus tres meses de prácticas en la Concejalía de Servicios Sociales, Patronato Deportivo y la Biblioteca Almudena Grandes del Polígono. Gracias al proyecto 'Juntos Somos Capaces' de la Fundación Mapfre, han desarrollado sus primeras prácticas laborales, que esperan que sean la puerta de entrada al mundo del trabajo.
Este es el décimo año que se desarrolla este proyecto en Toledo, gracias al convenio que han renovado por novena vez el Ayuntamiento de Toledo y Plena Inclusión Castilla-La Mancha. Tras el final, feliz y sus tres meses de trabajo con Elísabeth, la edil de Servicios Sociales, Marisol Illescas, ha explicado que «es importantísimo que cualquier persona tenga la oportunidad de trabajar. Y las personas con discapacidad están preparadísimas. Hay que animar a empresas y administraciones a que se unan a este carro». A su juicio, el trabajo es enriquecedor para todos y tras estos meses de prácticas estos jóvenes no solo cambiado su perspectiva, «también ha habido un cambio laboral y personal, porque se sienten útiles, parte de una sociedad, y que pueden trabajar en iguales condiciones que los demás».
Plena Inclusión. El gerente de Plena Inclusión Castilla-La Mancha, Daniel Collado, coincidió con Illescas en que «este empleo que tanto deseamos todos en nuestra vida nos ayuda a vivir de forma digna, convivir con nuestro vecinos y tener una vida plena».
«Imaginaos lo difícil que es conseguir una vivienda para una persona con discapacidad. Debe aportar un contrato, dos meses de garantía y condiciones a veces imposibles de conseguir», argumentó Collado, convencido de que el inicio de una vida plena comienza por un empleo, y que sin él, fallarán otras muchas cosas, «esos problemas los vemos en nosotros, pero para otras personas se multiplican por diez, como para las personas con discapacidad intelectual».
Collado quiere ir más allá de este convenio, que la sociedad apueste por estas personas. Ya existe un compromiso del Ayuntamiento para ampliar esa reserva del dos por ciento, para dar oportunidades a esas personas con especiales dificultades, y espera que el compromiso se amplíe al resto de la sociedad.
Finalmente, Lozano anunció un convenio con el colegio de Educación Especial Ciudad de Toledo, para que sus alumnos puedan utilizar la piscina climatizada de forma gratuita. Y la Ciudad Europea del Deporte quiere ser inclusiva, sin dejar a nadie atrás.