El presupuesto de Obras, Servicios e Infraestructuras puso esta mañana a primera hora el acento en el nuevo contrato de limpieza viaria y recogida de basura que estrenó la UTE 'Valoriza-Acciona' el pasado 1 de abril. En el anteproyecto del área figuran dos partidas que confirman una importante reducción del coste del contrato que llamó la atención a la oposición durante la comparecencia de la responsable del área, Loreto Molina, para explicar las cuentas del próximo ejercicio.
El presupuesto en líneas generales se mantiene invariable respecto a 2023, salvo en lo relativo a los proyectos pendientes de ejecutar, como el de la Vega o el de bajas emisiones , que están ligados a las cuentas de este año. Sin embargo, la portavoz del PSOE, Noelia de la Cruz, hizo hincapié en la reducción de 721.663 euros en el actual contrato, de los cuales 427.047 euros menos corresponden a la limpieza viaria y los 294.616 euros restantes a la recogida de basura, puesto que considera inviable que el servicio se ofrezca «con los mismos estándares de calidad» con un menor gasto e intuye que al final «se va a cargar a las espaldas del servicio».
La caída de los costes del contrato también sorprende al portavoz de IU, Txema Fernández, al que no le salen los números si se tiene en cuenta que «tenemos las mismas calles, los mismos contenedores, tenemos más y vamos a usar menos». Una difícil ecuación, en su opinión, que invita a pensar «en el milagro de los panes y los peces».
En este caso, el portavoz del Ayuntamiento, Juan José Alcalde, salió al paso y rebatió a Noelia de la Cruz porque entiende que no puede sorprenderse por unos números que parten del equipo de Gobierno anterior del que formaba parte. En este caso, la portavoz socialista cortó de raíz el comentario dejando claro que ella no estaba dispuesta «a entrar en las sorpresas personales o profesionales del portavoz del equipo de Gobierno».
Al margen de la tensión política que suele producirse en este tipo de comparecencias, esa notable reducción de la partida tiene explicación y la responsable del área apuntó que el contrato «tiene aristas y aún tiene muchas cosas pendientes». Por tanto, entiende que será necesario realizar algunos ajustes y buscar la manera de incluir la iniciativa de colocar contenedores en el Casco para la eliminación del bolseo, una iniciativa que no entra en la concesión.
Respecto a estas pruebas, Molina se reunió ayer con Valoriza para planificar la siguiente ampliación de esta prueba piloto en el Casco y reconoció que esta idea «está teniendo un feedback muy bueno», que también se ha visto incrementado a raíz de la colocación de carteles a pie de calle, que a su vez ha logrado reducir notablemente la localización de bolsas en la calle.
A pesar de que la iniciativa marcha bien, Molina es prudente a la hora de plantear una solución definitiva. En este caso, el equipo de Gobierno municipal tiene que valorar el resultado de las distintas experiencias piloto y tendrá que analizar más adelante si esta fórmula «tiene encaje legal y jurídico» para implantarla definitivamente en el Casco, teniendo en cuenta que habrá zonas específicas en las que no será posible eliminar el bolseo porque no se podrán colocar contenedores.