No es noticia que Castilla-La Mancha se verá afectada por el Cambio Climático. Es más, es probable que no haya que usar ni siquiera el futuro para hacer esa afirmación. Pero un estudio del Observatorio Social de la Fundación "la Caixa" entra más al detalle y ha establecido cuatro zonas en función de cómo se verán afectadas. Es parte de los resultados del informe 'Más allá de la 'España vaciada': Cambio Climático, despoblación y globalización en las zonas rurales'
En el caso de Castilla-La Mancha, la mayor parte de la región estaría en la parte denominada la 'España erosionada'. En el mapa es la zona que coincide con el centro del país, el sur y también áreas de Galicia y Asturias. Según las mediciones del estudio, estas zonas no presentan graves problemas socioeconómicos, pero es el grupo más afectado por los incendios forestales y por la erosión del suelo.
También identifica en varios puntos de la región los municipios que engloba en la parte de 'España vaciada y económicamente marginalizada'. Son los territorios más afectados por la disminución de los precios pagados a los productores agrícolas.
En zonas montañosas o colindantes el estudio identifica al grupo de la 'España que resiste económicamente, pero se seca'. Son zonas con mayor proporción de áreas protegidas, pero registran una mayor disminución de las precipitaciones medias anuales.
También hay algunas comarcas de la región englobadas en lo que se identifica como la 'España exportadora', sobre todo al estar cerca de grandes ciudades. Es el grupo menos vulnerable, pero su especial debilidad está relacionada con la exposición a la globalización del comercio agrícola, dado que depende en mayor medida de las exportaciones.
Los autores del estudio consideran que la adaptación al Cambio Climático, la mitigación de la despoblación y la defensa de las rentas agrícolas deben ir acompañadas de políticas agrícolas y de un desarrollo rural más integrado desde un punto de vista socioambiental.
Mucho campo por investigar. Entre los deberes que se ponen los investigadores mencionan el estudio de la relación entre las olas de sequía y calor, el abandono rural, la desaparición de las explotaciones familiares, la concentración de tierras en grandes empresas, la intensificación agrícola y la desertificación
Detrás de este índice socioambiental está el trabajo de los investigadores Sergio Villamayor-Tomas, Daniel Gaitán Cremaschi, Beatriz Pierri-Daunt y Leticia Santos de Lima, del Institut de Ciència i Tecnologia Ambientals de la Universitat Autònoma de Barcelona (ICTA-UAB), y Esteve Corbera, del ICTA-UAB y de la Institució Catalana de Recerca i Estudis Avançats (ICREA).