Llovía ayer a cántaros a las 9:40 de la mañana en Carmena. Era un día desapacible que arrastraba también una pésima noche en este pueblo de casi un millar de habitantes. Un vehículo se paró entonces en la plaza del Pilar, entre unas calles barridas de vecinos. Se bajaron entre tres y cuatro tipos embozados, uno de ellos con un arma de fuego. Cinco minutos después, salían del estanco con el botín y un reguero de intimidación.  

El dueño temblaba como un flan. La banda amenazó su integridad con un arma de fuego en un negocio sin clientes, afortunadamente. El atraco fue rapidísimo, con el tabaco como botín principal. Los cinco individuos huyeron en un turismo sin mostrar la cara.

Se trata del primer atraco con arma de fuego ocurrido en este municipio de la comarca de Torrijos. Pero la sensación de inseguridad en la zona había calado también en esta localidad. Tanto, que el Ayuntamiento instaló en junio cámaras de videovigilancia en las accesos al municipio por carreteras y por camino.

La Guardia Civil revisará ahora el contenido de los equipos para tratar de identificar a estos embozados que aprovecharon la lluvia para atracar el estanco con menos impedimentos en la plaza del Pilar, una de las tres repartidas por el municipio.

El Ayuntamiento invirtió unos 20.000 euros en la adquisición e instalación de estos equipos de videovigilancia, cuyo contenido había revisado ya en ocasiones anteriores la Guardia Civil para sus investigaciones. Tanto por denuncias de delitos ocurridos en el municipio como por otras en localidades próximas.