La concejal de Servicios del Ayuntamiento de Toledo, Loreto Molina, ha hecho balance de la cuarta fase de la implantación del sistema de contenedores para eliminar el bolseo en el Casco Histórico, colocados en la zona de Núñez de Arce, donde el resultado es positivo, en general, si bien sigue encontrando bolsas en el suelo. También han corregido el comportamiento de algunos establecimientos hostelería que saturaban estos recipientes recordándoles que están solo para los vecinos particulares.

En total, indica que ya son 42 calles y 61 contenedores y anuncia que están elaborado un estudio con el fin de ampliar el número de ambos para continuar este proyecto que todavía no se sabe si podrá ser definitivo ya que tienen que ver el encaje jurídico con el contrato de la recogida de basura.

La última fase son 7 calles con 10 contenedores grandes (de 800 litros) y un buen balance. La empresa asegura que le resulta más fácil la recogida con contenedores y por sugerencia de los vecinos van a preparar carteles dónde se indica la colocación ya que en algunos casos no los encuentran.

Además hace un llamamiento a los jóvenes «gamberros» para que por favor tengan civismo y no muevan los contenedores.

Insiste en que el comercio y la hostelería tienen su propio horario para la recogida y afirma que está a pie de calle recorriendo la ciudad de manera que no necesita que nadie le informe de cómo está sucediendo está prueba piloto.