Pedro Amador, geólogo jubilado, dedica sus 71 primaveras a la maduración de la exposición itinerante 'Mancharte', una oportunidad de promoción de artistas y de reverdecimiento de los pueblos manchegos. Precisamente, el creador vive en uno de ellos: Tembleque. «Es angustioso.  Debes tener todo preparado porque el corte de luz puede llegar en cualquier momento», explica.  

Afectado por un enfisema pulmonar, Pedro vive pegado a un respirador artificial. Las 24 horas. Usa este aparato imprescindible desde hace cuatro años, el mismo tiempo que Tembleque acusa unos microcortes de luz que mantienen en vilo a los vecinos. Muchos preocupados por internet o por los electrodomésticos; unos pocos, preocupados por su vida. Una anomalía agravada entre el sábado y el martes por una avería que disparó el enfado de la población.

«Es hora de que se tome una medida. No se puede jugar con la salud de la gente así como así. Hablamos de la vida de unas personas. Es un problema muy serio», enfatiza Pedro. Los cortes de luz, incluso breves, pueden desconfigurar el respirador artificial; ha ocurrido en ocasiones durante estos cuatro años. «Es crítico totalmente», apunta. Principalmente, para los ancianos, que pueden quedarse sin administrador de oxígeno alternativo.

Tembleque, Villacañas, El Romeral y La Guardia arrastran el lastre de los microcortes. En Tembleque, por ejemplo, los vecinos atribuyen a las anomalías las averías fatales en electrodomésticos como lavavajilllas o en aparatos relevantes como los router de internet.

Como publicó ayer este diario, el tiroteo a una torreta de la luz en el término de Villacañas ocasionó la avería prolongada entre el sábado y el martes. Cuatro días con repetidos cortes de luz, un quebradero de cabeza para las familias con ancianos atados a un respirador artificial.

El alcalde de Tembleque, Jesús Fernández, expresó sus sospechas de que la corrección de esta avería no implica una solución de los microcortes. La reparación de esta anomalía puede pasar por una intervención global en la conducción de las torres entre los municipios de Villacañas, La Guardia, El Romeral y Tembleque.

Jesús, trabajador del Ayuntamiento de Tembleque de 45 años, utiliza una máquina llamada CPAP para corregir la apnea del sueño mediante la canalización del aire de la habitación. El aparato eléctrico anula sus ronquidos y el riesgo de esta enfermedad; por eso, recurre a él incluso en las siestas, gracias también a que la Seguridad Social cubre los gastos. «Si no tengo la máquina, prefiero no dormir», reconoce.

Esos microcortes ocasionan unos sustos tremendos por la desconexión de las máquinas. «Das un salto en la cama, es como si te taparan la nariz», asevera.

Jesús duerme intranquilo las noches de tormenta por el temor a uno de esos microcortes que castigan la localidad desde hace unos cuatro años. «Duermes con un ojo abierto y otro cerrado», enfatiza. «Con el temporal 'Filomena' es entendible que haya cortes, pero que ocurra en noches tranquilas y sin aire.. Y en nuestra zona, que es llana», lamenta este enfermo de apnea del sueño, que añade que los técnicos especializados en este tipo de máquinas tienen numerosos usuarios en este municipio manchego.

El problema de la anomalía en el suministro de la luz se agravó del sábado al martes con esa avería, localizada tras días de revisión en la torreta ubicada en Villacañas. Los daños a un protector de la conducción por unos tiros desencadenó numerosos y largos cortes durante esos cuatro días. Más angustia añadida para estos enfermos.