Cerro Chaves: "La Eucaristía es el antídoto de la soledad"

M.G
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El arzobispo de Toledo preside la misa del Corpus en la Catedral e invita a la ciudadanía a ser "peregrinos de la fe" durante la homilía. El primado recuerda que "el mundo está en llamas" con más de 50 conflictos armados en la actualidad

La misa se ha celebrado en la Catedral - Foto: Y.Lancha

La Catedral, la anfitriona de la fe y la tradición, ha abierto sus puertas esta mañana a miles de fieles toledanos y visitantes para celebrar la misa del Corpus Christi, la eucaristía que da la bienvenida a una fiesta en la que toda la ciudad se vuelca con la Custodia de Enrique de Arfe. Como es habitual, la misa la ha presidido el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, que segundos antes de que se iniciase la misa en rito hispano-mozárabe, que procede de un grupo de liturgias en lengua latina que adoptó Occidente entre los siglos V y VII, perfumó el altar con incienso, esa mezcla de resinas aromáticas que está tan presente en el templo este día y en las calles del Casco encargadas de recibir la procesión.

Quizá la palabra entusiasmo sea la que mejor defina la entrega y la devoción con la que se vive, se siente y se huele el Corpus en Toledo. Y esas mismas características se asoman en una Eucaristía que todos los años espera con cierta impaciencia la homilía del arzobispo, que suele invitar a acercarse a Jesucristo y a reflexionar sobre el significado del Evangelio. En esta ocasión, dividió el sermón en tres breves claves tras tomar la palabra para expresar que se encontraba "contento y feliz" por celebrar el Corpus, una fiesta que en Toledo "brilla más que el sol".

A continuación, el arzobispo recordó que el Corpus "arranca del Evangelio, de la Eucaristía" y reafirmó públicamente "que el corazón únicamente descansa en Jesucristo", como en más de una ocasión pronunció el Papa Juan Pablo II en su momento. Cerro Chaves insistió en que "la Eucaristía es vida" y trae consigo una profunda reflexión que remarca la necesidad de abrazar la fe y la religión. "Quien coma de este pan vivirá para siempre", subrayó y aprovechó para recordar que en los entierros también está muy presente "y se recuerda al menos que la persona comulgó, al menos una vez, y tiene una promesa de vida eterna".

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Cerro Chaves dirigió la homilía a todos, a los que abrazan la fe y a los que no, a las cofradías que procesionan por las calles y también a los niños y jóvenes "que no se acercan a la iglesia". La segunda idea que el arzobispo trasladó, al igual que en el sermón del año pasado, parte de la cercanía de Dios, de un "Jesús que va a la calle y a la gente", que alcanza balcones y ventanas de Toledo en la que se asoman personas que siguen la procesión y no han bajado a las calles.

"El cristiano no es vagabundo, es peregrino", explicó Cerro Chaves para resaltar que los ciudadanos no pueden convertirse en vagabundos "porque ni saben dónde vienen ni a dónde van", el camino, según remarcó, es seguir a Jesús y aspirar a ser "peregrinos de la fe"

El arzobispo no eludió la violencia actual y subrayó su preocupación por "los más de 50 conflictos armados" activos en el mundo en este momento. De ahí volvió a referirse a Dios, a la Eucaristía y al único camino que garantiza "que sólo quienes adoran a Dios son libres", el remedio más eficaz para dejar atrás "el síndrome de la soledad". Por tanto, Cerro Chaves culminó la reflexión destacando que la Eucaristía "es el antídoto contra las soledades" y aludió al amor de Jesús y su generosidad al acompañar a las personas "en el camino de la vida".

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La homilía finalizó con un expresivo resumen del arzobispo de las palabras del Papa Francisco. "Otro mundo es posible", señaló y segundos más tarde también reconoció que el presente se ha sumido "en un mundo en llamas" y para sofocarlo es necesario acudir a la fe y a Jesucristo para encontrar el camino, ya que "el que se pierde a Jesús se pierde lo mejor de la vida".

Asistentes. La misa de Corpus congregó a numerosas autoridades políticas, eclesiásticas, militares y civiles. El arzobispo saludó a la mayoría de ellas, empezando por los religiosos que le han arropado de cerca en esta ocasión, como los arzobispos de Budapest, de Panamá, de Córdoba, de Santa María la Mayor; el auxiliar de Zárate (Argentina); el Padre Tony, desde Tierra Santa; el arzobispo emérito de Toledo, Braulio Rodríguez Plaza; el obispo auxiliar y secretario de la Conferencia Episcopal, César García Magán; y varios sacerdotes suecos que por primera vez están disfrutando del Corpus en la ciudad.

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Cerro Chaves: "La Eucaristía es el antídoto de la soledad" - Foto: Y. Lancha

Entre las autoridades políticas destacan, la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón; el presidente de las Cortes regionales, Pablo Bellido; el presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page; la presidenta de la Diputación de Toledo Conchi Cedillo; y el alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez, acompañado de los concejales que forman el equipo de Gobierno municipal.