Cada rincón del recorrido de la procesión del Corpus Christi en Toledo tiene su propio encanto. Este año, una de las novedades más destacadas para quienes deseen disfrutar de esta celebración es la instalación de un nuevo graderío en la plaza del Ayuntamiento.
Este graderío, que ofrece una perspectiva fresca y diferente de la procesión, ha sido diseñado para mejorar la experiencia de los asistentes. La estructura cuenta con más de 100 asientos distribuidos en siete filas, lo que permite a los residentes de Toledo disfrutar cómodamente de este nuevo espacio.
El objetivo de este nuevo punto de observación es facilitar una experiencia más cómoda y accesible durante una de las fiestas más profundamente arraigadas en la provincia y, especialmente, en la ciudad de Toledo. Este cambio busca enriquecer la tradición y hacerla aún más especial para todos los asistentes.