La economía de Castilla-La Mancha podría crecer a lo largo de 2023 un 1,9% y el empleo subir un 1,3%, y para 2024 las previsiones apuntan a un crecimiento del 1,9% del PIB y del 1,4% del empleo, según el último número del informe 'Previsiones Económicas de Castilla-La Mancha', elaborado por el Grupo Unicaja Banco.
El cuarto número de este informe semestral estima que la tasa de paro se sitúe en el 13,9 % al terminar 2023 y que en el promedio del año 2024 sea del 13 %, según ha informado Unicaja Banco en un comunicado.
Las previsiones realizadas por Analistas Económicos de Andalucía apuntan a que en el conjunto de 2023 el PIB de Castilla-La Mancha podría crecer un 1,9 % y que en 2024 la tasa de crecimiento podría mantenerse en el 1,9 % -en línea con la media nacional- en un contexto de elevada inflación, altos tipos de interés, debilitamiento de la actividad a escala internacional y crecientes tensiones geopolíticas.
En el promedio de 2023, el número de ocupados (según cifras de la EPA) crecerá un 1,3 %, sobre todo en el sector servicios, y la cifra de parados podría descender un 2,2 %, lo que sitúa la tasa de desempleo en el 13,9 % en el promedio del año, que son 4 puntos menos que en 2022.
Este crecimiento del 1,9 % del PIB en 2023 es una tasa ligeramente inferior a la prevista para el conjunto de España y en torno a 2,5 puntos por debajo de crecimiento estimado en 2022.
Según estas previsiones, en 2023 las tasas de crecimiento a escala provincial oscilarán entre el 1 % de Cuenca, el 1,6 % de Ciudad Real, el 1,8 % de Albacete, el 2,1 % de Toledo y el 2,4 % de Guadalajara.
En el segundo trimestre de 2023 la actividad se ha moderado en todas las provincias de Castilla-La Mancha respecto al primer trimestre.
Atendiendo a los grandes sectores, el fuerte aumento del empleo experimentado en Guadalajara entre abril y junio, en términos interanuales, está relacionado con la industria y los servicios y, en menor medida, con la construcción.
En Albacete, ha sido el sector terciario el que ha contribuido a la creación de empleo; en Toledo han incidido el sector terciario y la construcción, y en Ciudad Real también ha sido la construcción, mientras que la disminución de ocupados en Cuenca obedece a un descenso generalizado, exceptuando la industria.