En ocho días puede quedar el futuro resuelto: o te enchufas a los 'playoff' o quedas KO y con la temporada ya perdida. Es muy radical la propuesta, pero hay cierta verdad si se mira la trayectoria de las últimas semanas. Lo que necesita el CD Toledo es despertar ya, y en el anexo de La Moheda, de césped artificial, no cabe otro resultado que ganar para no hundir más a sus aficionados y convertir lo que falta en todo un calvario (y no por la Semana Santa).
No hay mucha esperanza entre los que siguen a este equipo, el ambiente parece deprimido y hasta se han dejado de presentar proyectos importantes por el tropiezo en el campo del colista. No parecen las formas más idóneas para ser optimistas, pero es el momento de los jugadores. Deben recuperar sus dotes de futbolistas, su espíritu colectivo y su amor propio para que la gente recobre la fe perdida.
Al menos, a Rubén Gala le han venido bien estos quince días para ir recuperando jugadores, así que va a poder desplegar el once que más le convenga. Nadie está en su mente. Lo ha ido probando todo, con cambios de sistema y entradas y salidas de jugadores. Unax y Marcos González ya están disponibles, mientras que Martín Pérez ya ha recuperado el nivel después de su lesión, quizás puede confeccionar un once con los más aptos en la práctica, y no en la teoría. Aunque es verdad que Iván González y Luna están en el dique seco.
Así, Yelco Ramos estará en la portería, con Peteiro y Marcos González en los laterales, con una pareja de centrales que podría ser la formada por Ramón y Carlos Moreno, sin descartar la entrada de Kupen. Por delante, parece que podría apostar por un trivote con Martín Pérez, Theo y Rodri, sin descartar a Pepe Delgado en la mediapunta. Finalmente, Manu Gavilán jugará en la punta del ataque, para dejar las bandas a Chupi y Angelito.