Fernando Lussón

COLABORACIÓN

Fernando Lussón

Periodista


Aroma de corrupción

05/03/2025

En la localidad madrileña de Arganda del Rey se juzga un nuevo episodio de la trama Gürtel, en este caso por las comisiones y mordidas por adjudicaciones amañadas. La Audiencia Provincial de Madrid ha aceptado que el novio de Isabel Díaz Ayuso sea investigado por corrupción en los negocios y el supuesto pago encubierto de una comisión por los trabajos que ha realizado con una de las patas del grupo Quirón. La declaración en el Tribunal Supremo de la exnovia del exministro de Transportes, José Luis Ábalos a quien consiguió trabajo en dos empresas públicas a las que no acudió ni un día a trabajar es otra derivada del caso Koldo. Tres asuntos que vuelven a desprender el aroma de la corrupción que afecta a la vida política y aunque no es tan intenso como en otras ocasiones deja una nube hedionda que hace palidecer otros casos que se quieren hacer pasar como la quintaesencia del fraude.

Los abogados de Alberto González Amador, el novio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, llamado gráficamente por su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, como 'Alberto Quirón', han actuado con inusitada rapidez para tratar de que se vean estos últimos presuntos delitos antes que el fraude fiscal por el que su nombre saltó al conocimiento de la opinión pública, después de que realizara un negocio millonario con las mascarillas durante lo peor de la pandemia y que tratará de disfrazar sus beneficios con facturas falsas para evitar pagar 350.000 euros a Hacienda. Si por algo se ha destacado la defensa de 'Alberto Quirón' ha sido por tratar de dilatar su presencia ante el juez, utilizar argucias leguleyas y por tratar de difuminar su responsabilidad con los procesos contra el Fiscal General del Estado o los iniciados contra autoridades y periodistas porque se le ha llamado delincuente confesó. La defensa de este "ciudadano particular" iniciada por su pareja, que se considera víctima de una operación de Estado en su contra utilizando sus relaciones personales ha dado una dimensión política inusitada a la actuación de un defraudador fiscal reconocido por su abogado en el escrito de conformidad remitido a la fiscalía para no ir a la cárcel por dos presuntos delitos fiscales.

El nuevo juicio de Gürtel trae también aromas de otros tiempos, pero ahora todo es más fácil porque los procesados en esta trama de Arganda del Rey han reconocido los hechos y colaboran con la justicia para obtener una rebaja de penas. El modus operandi en este ayuntamiento fue el mismo que Francisco Correa y sus secuaces utilizaron en otras ocasiones, adjudicaciones irregulares por las que pagaban comisiones al alcalde y a otros funcionarios municipales para engrasar la maquinaria, lo que incluía recalificaciones de suelo. 

La declaración de la pareja de Ábalos durante su etapa de ministro, Jessica Rodríguez, ha demostrado la catadura moral de quien también fuera hombre fuerte del PSOE y del Gobierno que no dudó en aprovechar su cargo para dar cobertura a sus intereses personales y se apuntala cada vez más la evidencia de que en su ministerio anidó una presunta organización criminal que se dedicó al tráfico de influencias, el cohecho y que malversó dinero público, el pack completo de los delitos relacionados con la corrupción política.