Contento por el resultado, pero insatisfecho con el juego. Así se mostró Alfredo Santaelena tras el 0-2 conseguido por el CD Toledo en el José Camacho frente al Manzanares CF. El técnico cree que hubo fases en las que tuvieron que dar «mucho más». Y no por capricho suyo, sino «porque lo ha demostrado en la pretemporada y porque tiene futbolistas para hacerlo». De este modo, fue contundente: «Quiero que mi equipo dé otra imagen».

Desde su punto de vista, el partido estaba controlado con el 0-1, pero el conjunto toledano «dio alas al rival». De hecho, resaltó «el paradón de Dani (Ramos) que pudo ser perfectamente el 1-1». Según sus palabras, «faltó tranquilidad para circular el balón más rápido de un lado a otro».

Es algo que intentó corregir tras el descanso, consciente de que «el rival también juego», y es cierto, añadió, que «el Manzanares metió una marcha más» y llegó a «provocar algo de miedo», pues el madrileño entiende que «no crearon muchas más ocasiones que la que sacó el portero».

Santaelena está convencido de que el CD Toledo pudo «jugar algo más» en ese campo, e insistió una vez más en que cuenta con «jugadores con mucho talento». Por este motivo, cree que «hay que dar un plus», ya que «te lo demanda la categoría, y sabemos lo que nos vamos a encontrar, a equipos que te pueden complicar si no te muestras intenso y agresivo en todo momento». Lo ve como algo innegociable «para conseguir el objetivo».

En la segunda parte del encuentro, vio que su equipo estaba «algo largo», y eso facilitó que «ellos recibieran entre líneas». Por eso, dio vuelta a la misma idea: «Hay futbolistas para hacerlo mejor, no me lo invento yo».

El partido en tierras ciudadrealeños dejó un nuevo lesionado, Kupen. Se incrementaron los problemas en el centro de la defensa, por las sanciones de Iván y Sergio González. Tuvo que salir Iker García, que ya debutó el curso pasado con el primer equipo. El juvenil, según el entrenador verde, «lo hace muy bien y tiene mucha personalidad», así que Alfredo no va a tener «ningún reparo en ponerlo», como él mismo dijo.

Es algo que no le preocupa demasiado, y que, por supuesto, ni lo usa como excusa. «Mientras que tengamos once para la semana que viene, no hay ningún problema», concluyó.