Un convenio marco como el de Vega Baja «lo podría firmar legalmente un director general». Pero en este caso concreto, el ministro de Cultura, Miquel Iceta, ha querido estar en un primer plano por su importancia. También por la importancia «de preservar el patrimonio». Y en este caso, «se había promovido un crecimiento urbanístico que no era respetuoso con el patrimonio» y era necesario lograr el compromiso y el trabajo conjunto de las administraciones.
«Nos lo dice la Unesco», insistió Iceta, pero, sobre todo, hay que tener en cuenta que Vega Baja «concentra muchos BIC y es una parte imprescindible de la historia de España». El ministro de Cultura está convencido de que «Toledo encierra muchas explicaciones de cómo hemos llegado a ser lo que somos» gracias a su pasado histórico y su amplio valor patrimonial, razones suficientes para que las tres administraciones trabajen «en el descubrimiento de este patrimonio» en Vega Baja.
Iceta no disimula que la materialización de los compromisos llevará años. «Va a requerir mucho tiempo, pero lo importante es empezar, la claridad de ideas y el compromiso». En este caso, el ministro de Cultura tiene claro la historia tiene un papel protagonista en nuestro país. «La historia no es solo un motivo para la nostalgia y para mirar atrás, es un motivo para proyectarnos en un futuro».
Iceta subrayó que las sociedades que no valoran su pasado «están condenadas al fracaso» y cree que Vega Baja atesora un valor patrimonial tan importante que exige el esfuerzo y el trabajo conjunto de Cultura, de la Junta y del Ayuntamiento de Toledo en los próximos años.
«España es un museo a cielo abierto y tiene un yacimiento excepcional en Toledo». Por este motivo, Iceta dio a entender que se irán poniendo en marcha distintas actuaciones para mejorar, proteger y potenciar Vega Baja en los próximos años y espera que en un futuro se valore el acuerdo alcanzado tras meses de trabajo. «Dentro de unos años podremos decir que esto nació de un convenio ambicioso».
La gestión. Aún es pronto para dar a conocer el modelo de trabajo en Vega Baja, pero será uno los asuntos prioritarios en las próximas reuniones de las tres administraciones. El ministro también deslizó ayer la posibilidad de que el Consorcio pueda asumir la gestión de la zona porque se trata de un organismo «que tiene que velar por el patrimonio de Toledo».