Fue a mediados de enero. Un grupo vecinal de La Legua y Vistahermosa hablaba de «manifestación ratuna en Juan Bautista Maíno». Fue en sábado y a las siete de la mañana y una mujer denunciaba que los roedores se habían comido los cables de su vehículo. Los residentes de La Legua llevan comentando desde hace más de un año la presencia de ratas por sus calles, algo que ya han comunicado al Ayuntamiento. En los últimos meses, la plaga se ha extendido a Valparaíso y su Asociación de Vecinos, que llevó el problema al último Consejo de Participación, reivindica una actuación integral del Consistorio en las tres urbanizaciones para terminar con el problema. También se ha llevado a reuniones con el alcalde, Carlos Velázquez, tanto de asociaciones, como vecinos a título personal. Después de estas denuncias, y más con las últimas lluvias, el Ayuntamiento está intensificando sus actuaciones de desratización, apunta el edil responsable, Rubén Lozano.

Explica la presidenta de Río Chico, Belén Molina, que el año pasado ya se escuchaba hablar de este problema en La Legua y hay vecinos allí que tienen que contratar una empresa de desratización cada tres meses. La empresa le cuenta que hay bastantes ratas en las alcantarillas. Ya el verano pasado ella misma se las encontró andando por la calle. Su temor es que, si no hay una atención integral en calles y alcantarillas, con la llegada del buen tiempo se convierta en «un problema de salud importante, nuestro y de nuestros hijos, porque los pueden morder alguna».

Ante esta situación, critica Molina, la respuesta del Ayuntamiento está siendo hasta muy puntual. Cuando recibe la denuncia de alguna vivienda, como recientemente en la avenida del Castaño, donde una vecina había cogido la rata en una jaula, manda a la empresa de desratización. A su juicio, «eso no se puede consentir, si se sabe que hay ratas tanto en Valparaíso como en La Legua, tienen que hacer un plan de atención integral, para todos los barrios, incluido Vistahermosa, no atender solo a una calle». No puede ser que solo se actúe en la avenida del Castaño, porque las ratas están en todo el barrio y han vecinos que están pagando empresas privadas. Hará falta una actuación integral en los tres barrios al mismo tiempo, para que los roedores no salgan huyendo.

Preocupa la presencia de ratas en Valparaíso y La LeguaDesde La Legua, Enrique Navarro reconoce el problema, aunque tampoco se atreve a hablar de «epidemia». Sobre todo le llegan fotos procedentes de espacios al final del barrio, hacia el campo, pero hasta la Asociación solo han llegado en un año cuatro o cinco quejas, él no las ha visto por la calle. En cualquier forma, la Asociación de Vecinos ya ha mantenido varias reuniones con el Ayuntamiento, que han llevado a un reforzamiento del control de plagas. Los técnicos conocen el problema. El problema que le han comentado es que, tan cerca del campo y con basuras sin recoger, llegan los roedores. También destaca que los gatos que hay en la zona no cazan ratas porque hay vecinos dándoles de comer.

Más allá, Molina reconoce el esfuerzo inversor del Ayuntamiento en infraestructuras de gran calado para la ciudad, «pero no puede ser a costa de descuidar el mantenimiento de los barrios, y el nuestro consideramos que está muy descuidado». Habla de mantenimiento, limpieza de calles, acerado y la situación del centro cívico, todavía lleno de goteras, años después. Además, «no han hecho, ni sabemos que quieran hacer ninguna inversión específicamente en Valparaíso, ni La Legua, de todas las que hemos pedido, como arreglar el campo de fútbol o acabar la última mediana». A eso se une las ratas.

Intensificación. Ante esta situación, confirma el concejal Rubén Lozano, el Ayuntamiento ha puesto en marcha actuaciones intensivas de desratización y de control, como cada vez que hay avisos de los vecinos de ratas o insectos.