El Día Nacional de la Caza ha reunido a representantes de todo el sector cinegético para poner de manifiesto la unidad de acción de este colectivo, ante cualquier ataque que ponga en riesgo el futuro de la caza en España.
Organizado por la Oficina Nacional de la Caza (ONC), el Día Nacional de la Caza se ha celebrado este domingo en Ciudad Real, coincidiendo con la celebración durante este fin de semana de una nueva edición de la Feria de la Caza, Pesca y Turismo (Fecatur).
Un acto que ha contado con la presencia de numerosas del presidente de la Oficina Nacional de la Caza (ONC), Felipe Vegue, el presidente de la Real Federación Española de Caza (RFEC), Manuel Gallardo y el presidente de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha (FCMM), Agustín Rabadán.
Junto a ellos, también se han dado cita en este acto representantes de las distintas administraciones, entre los que se encontraban la directora general de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Esperanza Orellana, el vicepresidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, y el presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, entre otros.
Felipe Vegue ha señalado durante su intervención que el objetivo de esta jornada es reivindicar el futuro para la actividad cinegética haciendo llegar un claro mensaje a la sociedad, al Gobierno de España y a los de las comunidades autónomas de que el sector siempre defenderá ese futuro ante cualquier ataque que pueda sufrir.
Vegue ha valorado el papel que los cazadores tienen en el mantenimiento del medio rural, aún cuando son objeto de ataques incomprendidos por una parte "muy minoritaria" de la sociedad que se muestra en contra de la caza.
Por su parte, el presidente de la Real Federación Española de Caza, Manuel Gallardo, ha recordado que "en estos últimos tres años, el sector cinegético ha vivido probablemente la peor época de su historia".
Todo ello, ha indicado, debido a una política legislativa por parte del Gobierno de España, tras una ofensiva del mundo animalista que, ha dicho, "ha sido capaz de colarse en las instituciones, en las direcciones generales de los ministerios, con una militancia ofensiva contra la caza".
Eso, ha dicho, obligó al sector a movilizarse para hacer frente a los ataques a la caza que han llegado a través de una legislación lesiva para el colectivo cinegético, que ha sido muy difícil de combatir, pero a la que, ha dicho, se ha plantado cara, superando todos los obstáculos que se han encontrado en el camino.
En cualquier caso, ha advertido, el futuro no es halagüeño, y ha coincidido en pedir estar vigilantes ante las decisiones que puedan tomar los futuros gobiernos.
En este sentido, ha recordado que partidos políticos como el PSOE, PP y Vox han firmado un acuerdo en defensa de la caza, que tanto desde la Real Federación de Caza como desde la Oficina Nacional de la Caza se va a velar para que se cumpla en su integridad.
Para Gallardo, el futuro dependerá de que todo el sector sea capaz de convencer a cualquier gobierno y a la oposición de que la caza es una "actividad indiscutible e indispensable en la España actual".
Por su parte, la directora general de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Esperanza Orellana, ha puesto en valor la importancia de la caza como actividad vertebradora de la economía española, a la vez que ha resaltado la necesidad de preservarla para controlar las poblaciones.
Orellana también ha destacado el apoyo que el Ministerio de Agricultura ofrece a la caza, y para ello, ha aprobado la Estrategia Nacional de Gestión Cinegética, que nació con el objetivo final de que constituya el marco orientativo y de coordinación de la gestión cinegética a escala estatal, y con la que se busca fomentar la caza sostenible, mediante la realización de una gestión sostenible del medio y de las especies cinegéticas.