«Nosotros defendemos la sanidad pública, pero creemos que hay un descontrol tremendo en su organización», explica José Manuel García, como portavoz de un  grupo de usuarios de la misma que cada lunes se concentra desde las once de la mañana ante el centro de salud del Polígono para pedir soluciones. Para hacer esta afirmaciones, se apoya en los propios datos del Complejo Hospitalario de Toledo, según los cuales, en agosto había 9.000 personas en lista de espera para especialistas, y hoy son 16.000. Además, en el centro de salud del Polígono «pides una analítica y te vas a mes y medio, un médico de familia tarda 14 o 16 días, estamos viendo que esto se nos cae».

Al ver que ni asociaciones de vecinos, ni sindicatos, se han movilizado, este grupo de usuarios decidió tomar las riendas de la situación e iniciar las reivindicaciones. Desde el pasado 20 de enero, se suceden las concentraciones ante el centro de salud del Polígono, para reivindicar una solución al deterioro de la sanidad pública. Estos usuarios juntan delante de las instalaciones y por turnos dan información a todo aquel que se interesa, la idea es que haya gente por la mañana, aunque no sean muchos. Este lunes el candidato a la Alcaldía por Ciudadanos, Esteban Paños, se ha acercado a escuchar sus reivindicaciones.

Sin ataques. Estos usuarios ya se han reunido con el coordinador médico del centro de salud, al que le han explicado que no van contra nadie, sino a favor de la sanidad pública, para que haya más organización y personal, «con los profesionales no estamos disconformes, sino con el servicio, que es un caos». Desde la administración han mostrado su acuerdo con que hay que crear más puestos de trabajo. Otra cosa es que los usuarios vean alguna respuesta en este sentido.

A lo que se oponen estos usuarios es a buscar la solución a la sanidad con transferencias de las listas de espera y atenciones a la sanidad privada, lo que a su juicio se traduce en menos recursos económicos para la sanidad pública. También observan que, es cierto, el Sescam está comprando mucho material, «y sin embargo, no conseguimos que haya más médicos». De forma que el centro de salud del Polígono tiene unas 1.700 cartillas por médico, cuando los organismos internacionales recomiendan 800, 1.200 como máximo. En definitiva, «hay una serie de cuestiones de ese estilo, que nos están alarmando, y creemos que debería haber una movilización para solucionarlas, porque somos de las pocas comunidades que no se están movilizando», apunta García.