Una médica embarazada ha sufrido una agresión en el centro de salud de Mora por parte del padre de una paciente a pesar de que le avisó de su estado, según ha denunciado este lunes la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF).

En un comunicado, el sindicato ha explicado que la agresión se produjo el viernes de madrugada en el centro de salud de la localidad toledana, donde el padre de una paciente arrinconó a la médica en la consulta y la amenazó a pesar de comunicarle que estaba embarazada.

En concreto, la paciente acudió al centro de salud con su hermana y, de malas formas, mostró su desacuerdo por el tratamiento que prescribió la facultativa.

Veinte minutos después se presentó el padre de la paciente que, con gritos y una actitud violenta, le levantó la mano en ademán de agredirla físicamente, la acorraló en la consulta y le dijo "te vas a enterar".

En ese momento, la médica le comunicó que estaba embarazada y que "por favor" tratase de tranquilizarse pero en lugar de deponer su actitud violenta, el padre de la paciente continuó gritando y amenazando a la médico, que fue auxiliada por una enfermera, momento en el que aprovechó para escapar de la consulta y acudir a la zona de Administración para llamar al 112.

Fue entonces cuando el agresor se marchó del centro si bien tanto la médica como la enfermera han presentado denuncia.

La médica agredida ha señalado que le avisó de que estaba embarazada pero "ni siquiera eso suavizó la situación" sino que, al contrario, "le dio igual y me dijo que si hacía falta que llamara a las autoridades".

"En ese momento me quedé helada, ya no es que sea médica, es que soy una mujer que está embarazada y le dije que estoy en una situación bastante más vulnerable; pensé que o salgo corriendo de aquí o me da un golpe en la barriga y pierdo a mi hija, fue un poco aterrador", ha manifestado la sanitaria.

Por todo ello, una vez más, CSIF ha reclamado vigilancia en todos los centros de salud y la responsable de Sanidad Toledo, Marisa García, ha advertido de que los profesionales están "desprotegidos" y ha lamentado que el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) "mira hacia otro lado", así se ha preguntado si hay que esperar a que "suceda una desgracia" para tomar medidas.

A su juicio, es evidente que el Sescam tiene que actuar ante las últimas agresiones registradas pero le ha afeado que ni siquiera haya convocado el Comité regional de Seguridad y Salud Laboral, que lleva sin reunirse desde noviembre de 2021.

"Contar con seguridad en los centros es simple y llanamente una cuestión económica, hacerlo sí que sería una política de apoyo a la Atención Primaria; el resto, es papel mojado", ha sentenciado García.