La Asociación Fotográfica de Toledo, en Colaboración con la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, ha organizado en la Biblioteca Regional del Alcázar la conferencia 'Narrativa visual en fotografía' a cargo del profesor Isidro Moreno Sánchez para quien la fotografía es «el relato sintético por excelencia».
Indica que aquello de que una imagen vale más que palabras «es verdad» y, al contrario, muestra su desacuerdo con las personas que dicen que la fotografía en sentido estricto no tiene narrativa. «Pero claro que tiene narrativa, hay unos personajes que en un espacio determinado y en un tiempo hacen algo que es acción» que se crea en la cabeza del espectador.
También señala que la imagen sin palabras se presta a la imaginación y que cuando se interpreta algo no es necesariamente lo que quiere el autor. Pero añade que en narrativa lo importante no es lo que quiere decir el autor, porque «una vez que se crea la imagen el fotógrafo muere y la obra es del receptor».
Sin embargo admite que la fotografía marida muy bien con los textos, los enriquece, aunque en medios como Internet la fotografía es la gran protagonista. Opina que la fotografía es un poco la madre de la narrativa.
Por otro lado prefiere una imagen real a hacer un montaje aunque a veces las ha preparado para algún fin concreto. Cuenta que se pasa las noches haciendo fotos por Toledo y va a publicar un libro de fotos nocturnas que marida con grandes de autores que han dedicado poesías a Toledo.
También recalca que la imagen es un lenguaje internacional aunque hay muchos códigos distintos y si presenta una imagen que del Cristo de la Vega sin texto alguien que no sabe nada lo de interpreta de una forma particular, «pero no va a haber nadie que diga que no lo entiende».
En cuanto a la manipulación de la imagen observa dos vertientes, una que depende del punto de vista y otra que sería malintencionada, por ejemplo hacer una toma parcial: «Toledo, que en general está limpísima, se puede hacer una foto de un rincón lleno de suciedad», e incluso un montaje como ya se ha hecho en otros lugares, indica. Por lo tanto manipular las fotos es «más peligroso porque queda como testigo».
Respecto a que los nuevos medios no contengan imagen lo ve impensable. Insiste en que cómo defensor de la imagen incluso aúna con poesía y cree que las imágenes son un testigo documental creativo.
«Se pueden hacer fotos contando los pecados capitales, una foto de la gula, que estaría preparada pero que contaría un historia. La fotografía hace que el planteamiento, desarrollo y desenlace estén reunidos en un solo plano. Es difícil pero más rico cuando se consigue».