El ocio nocturno estival en La Peraleda está dando que hablar. Con una de las terrazas hosteleras ya abierta, el Ayuntamiento de Toledo se vio incapaz de licitar la segunda al estar ubicada en los terrenos que ahora son propiedad del Ministerio del Interior para construir el nuevo cuartel de la Guardia Civil. Ante la demanda juvenil para contar con otro espacio más en el entorno, el equipo de Gobierno ha licitado una carpa desmontable en otro punto del recinto ferial. Aún sin adjudicar. Sin embargo, lo que parecía la solución no ha encontrado el consenso que pretendía.
Esto es así porque la Asociación de Hostelería y Turismo de Toledo cree que esta alternativa, la carpa desmontable, «no es que no nos guste, es que no soluciona el problema y genera otros problemas añadidos que perjudican al sector del ocio nocturno en Toledo». Y así se lo transmitieron al alcalde y a otros miembros del equipo de gobierno la semana pasada durante una reunión.
Le preocupan principalmente dos motivos. Uno de ellos -según expone el secretario general de la AHT Valentín Salamanca- tiene que ver con la falta de entendimiento entre el Ayuntamiento y la Delegación de Gobierno, a los que comunican que remitirán un escrito para pedirles que lleguen a un acuerdo que permita que si no se va a construir el cuartel al menos se pueda abrir Summerland, la terraza allí instalada, «que es lo que verdaderamente demandan los jóvenes».
Por otro lado, Valentín Salamanca desvela que los hosteleros de la ciudad no avalan las condiciones de la licitación, puesto que la nueva carpa de La Peraleda se licita por un período de seis meses, es decir, lo que a su juicio «rompería el equilibrio del ocio nocturno en la ciudad». Esto lo argumenta señalando que los locales del sector asumen que su actividad en verano se reduce porque los consumidores demandan espacios al aire libre, pero si esto se puede alargar «hasta enero o febrero» dejaría a estas empresas «con muy poco margen de actuación».
Salamanca cree que el adjudicatario de la nueva carpa va a realizar una inversión que dificílmente va a recuperar con el verano, «lo que le va a obligar a generar dinero con fiestas o conciertos cuando termine la época veraniega» generando una competencia que antes no existía en la ciudad. De hecho, este temor le llega a los hosteleros «de años pasados», ya que Salamanca recuerda cuando Farcama se celebraba en La Peraleda y «la carpa se mantenía hasta final de año celebrando allí macrofiestas y otros eventos». Desde la AHT creen que los plazos no son los correctos porque la licitación, más la correspondiente adjudicación y la instalación de la carpa van a hacer que los seis meses se alarguen hasta el inicio del año próximo.
Una situación que para Valentín Salamanca supone un golpe más para el ocio nocturno local, «muy machacado ya». Por ello, pide en nombre de la asociación que se adopten mecanismos legales para combatir otras modas como el 'tardeo', ya que las licencias de estos locales no les permiten abrir en estos nuevos horarios de moda. Plantean dobles licencias que lo permitan. Al margen de ello, insisten en la necesidad de «remover todos los obstáculos posibles» para que la situación de La Peraleda no rompa el equilibrio existente en este sector de la ciudad.