Era su quinta prueba en la distancia Ironman, y Hugo Nava se superó a sí mismo. El policía toledano, con un tiempo de 11 horas y 8 minutos, consiguió rebajar en más de veinte minutos su mejor registro anterior. Fue en México, en Cozumel, en una prueba que, además, satisfizo sus expectativas, y en la que reconoce que no se esperaba «tan buen resultado».
Acabó en el puesto 19 de su grupo de edad (35-39 años), pero lo mejor es el sabor de boca que le ha dejado: «Me ha permitido coger confianza porque me he acercado mucho a los mejores, y eso da moral para los próximos». Y es que, Nava se quedó a ocho puestos de haberse clasificado para el Campeonato del Mundo de Ironman, que en 2025 se celebrará en Niza (entraban los once mejores de cada categoría).
Así las cosas, confiesa que, salvo por detalles puntuales, el Ironman de Cozumel le gustó bastante porque «había muy poca gente, es una isla y muy llano, diferente a otros que había hecho». El sector de natación se realizó en el mar Caribe, y, como cuenta, «mientras nadábamos se podía ver la vida marina y a los buzos a veinte metros de profundidad, porque el agua era cristalina». Lo peor, «los picotazos que nos llevamos de las medusas».
El policía toledano participó en esta prueba a finales de noviembreYa en el segmento de bicicleta, es donde Hugo Nava encontró las mayores dificultades, a pesar de ser su favorito, y en el que suele rendir mejor. «Eran tres vueltas a la isla, y lo bonito es que la veías completa, pero hacía mucho viento, y eso destruía cualquier media positiva», explica. De hecho, confiesa que, con el aire en contra, «tenías que tirar de cabeza para no venirte abajo».
Tras este esfuerzo, narra también que cuando de bajó de la bici para afrontar el maratón le dolía todo por «haber estado los 180 kilómetros en posición aerodinámica, al no existir ningún repecho en el que poder descansar». Encima, eran, aproximadamente, las 3 de la tarde, así que hacía una temperatura muy alto. Esto provocó, como añade, que «tuviera que meter la cabeza de manera literal en los cubos de hielo que había en los avituallamientos».
El sector de atletismo fue «muy bien», porque «ahí es donde te das cuenta de que has estado entrenando todos estos meses para no parar», dice el triatleta toledano. Además, es donde se dio cuenta de que podía batir su propio récord de tiempo, pero eso no le restó lugar al disfrute: «Estaba atardeciendo, y pude disfrutar de un bonito paisaje».
El policía toledano participó en esta prueba a finales de noviembreComo a cualquier amante de la distancia Ironman, le encantaría poder participar alguna vez en el Campeonato del Mundo. De momento, en sus planes está seguir combinando los ironman normales con los extremos. De hecho, ha echado la inscripción en uno que se celebra en Noruega, y en el que había pocos dorsales.
Hugo Nava es albaceteño de nacimiento, pero toledano de adopción, después de haber pasado por varias ciudades españolas como militar y ahora como policía. Admite que es «muy complicado» combinar su trabajo y la vida familiar con los duros entrenamientos. Sobre todo, cree que se debe tener «mucha fuerza de voluntad, para entrenar a horas intempestivas».
Para preparar el Ironman de Cozumel, por ejemplo, ha invertido una media de 25 horas semanales. Lógicamente, entiende que «sin el apoyo de la familia sería imposible», así que da las gracias a su mujer y a su hija. En la agenda más a corto plazo, tiene pensado participar en algún medio maratón o algún triatlón. Tampoco descarta algún medio Ironman.