El proyecto de asociación entre la Unión Europea y Mercosur aspira a crear el mayor espacio global de comercio internacional sin aranceles. La propuesta, que cuenta con el voto favorable de España, vincula dos espacios geográficos separados por el Atlántico, pero ligados por aspectos históricos y culturales. La medida, rechazada por el campo y cuestionada por países como Francia e Italia, favorecerá la compraventa de productos a uno y otro lado del océano.
Son cuatro los países miembros (y fundadores) de Mercosur: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. En 2006, se adhirió Venezuela, aunque su permanencia quedó suspendida años después. Por su parte, Bolivia negocia su incorporación al club. Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Suriman son los estados asociados a este organismo supranacional.
En las tres últimas décadas, desde 1995, los cuatro países de Mercosur han vendido mercancías por valor de 322,2 millones de euros en la provincia de Toledo. Por su parte, la factura de las exportaciones de las empresas toledanas a esta porción de Sudamérica ha importado 209,8 millones en tal periodo. La balanza comercial confirma que desde la provincia se adquieren más bienes de estos cuatros países de los que se venden en sus respectivos mercados nacionales. La diferencia escala hasta los 112,4 millones, lo que supone un desfase aproximado de casi 4 millones por año. Por otra parte, y pese al paulatino y sostenido aumento de las exportaciones, el saldo negativo caracteriza las relaciones comerciales de Toledo con el resto del mundo.
Argentina, con 175,4 millones facturados en la provincia, ha sido el principal emisor de productos procedentes de América del Sur durante los últimos tres decenios. Por su parte, Brasil, la economía más potente del subcontinente, emerge como el principal destino de las ventas toledanas, con 104,3 millones de facturación. En ambos estados, la balanza comercial es negativa; esto es, el volumen de las compras supera al de las ventas. El saldo es de -122,1 millones en el caso de Argentina y de -60,6 millones para Brasil. Sin embargo, la situación se invierte en los casos de Paraguay y Urugay, dos estados de menor tamaño territorial y demográfico, pero buenos estándares de calidad de vida. Las exportaciones a Uruguay acumulan un negocio de 40,7 millones; las mercancías traídas desde el país del río de la Plata supusieron apenas 7,4 millones, lo que arroja una diferencia favorable de 33,3 millones. En Paraguay, las empresas de la provincia despacharon por valor de 11,5 millones y trajeron provisiones que costaron 5,7 millones, con un margen positivo de 5,8 millones.
Si se toma el dato relativo a 2023, el último ejercicio del que se ofrecen cifras completas, se observa a Brasil como principal mercado receptor de productos toledanos, con 2,7 millones en ventas, y a Argentina como el mayor granero de la provincia en Sudamérica, con 12,1 millones comprados. El pasado año, se enviaron bienes a los cuatro países de Mercosur por valor de 8,5 millones y se compraron, a los estados que integran este bloque, productos valorados en 21,3 millones. El saldo comercial se situó en 12,8 millones negativos.
En cualquier caso, los montantes que dejan las relaciones comerciales de la provincia con estos cuatro estados sudamericanos resultan poco cuantiosos respecto al acumulado de exportaciones e importaciones. En 2023, las empresas toledanas vendieron hasta 2.768 millones y compraron referencias que importaron 4.595 millones. La ratio del mercado que se pretende abrir no alcanza, en ninguno de los dos casos, el 1% del total del negocio. Los principales mercados se ubican en la Unión Europea.
SECTORES. La principal compra que los estados miembros de Mercosur realizan en la provincia corresponde con los bienes de equipo. En 2023, los cuatro países que forman este bloque comercial acarreron mercancías de este tipo, de indudable uso industrial, por valor de 4,7 millones. Las semimanufacturas adquiridas, también vinculadas al sector secundario, fueron pagadas por 1,7 millones. Los productos de alimentación y bebida, el capítulo que de forma recurrente lidera la clasificación exportadora de la provincia, generó ventas por valor de 1,6 millones.
En el mismo periodo, la provincia requirió de bienes procedentes de Mercosur por valor de 21,3 millones. Las compras tuvieron a los productos de alimentación y bebidas como grandes protagonistas. La factura por estos víveres alcanzó los 15,8 millones, una cantidad que confirma la apuesta de las empresas toledanas por el campo sudamericano y que materializa los temores de los productores locales. Sin embargo, la contabilidad que ofrece la Secretaría de Estado de Comercio no detalla compra de carnes, aunque anota 7 millones en azúcar y cacao, otros 4,8 millones en productos pesqueros y 2 millones en grasas y aceites.