La climatología y el parón de los trabajos en las obras para desdoblar el primer tramo de la antigua carretera N-V puede retrasar ligeramente el proyecto, que espera comenzar a echar el asfalto en los meses de marzo y abril, y darse por concluida a principios del próximo verano.

Así lo ha confirmado a este diario el delegado de la Junta en Talavera y comarca, David Gómez Arroyo, en el primero de los tres tramos en que se dividirá el anhelado proyecto del desdoblamiento en una de las principales entradas a la ciudad. Las obras para ampliar esta zona de la carretera N-V entre el Arroyo de las Parras y el núcleo urbano de Talavera, cuenta con algo más de un kilómetro de longitud y las ejecuta el Gobierno regional.

El tramo constituye el acceso principal a Talavera  y tiene un aforo de tráfico de casi 17.000 vehículos al día. La actuación consiste en la duplicación de este tramo y para ellos se ejecutarán dos calzadas separadas por una mediana infranqueable, arcenes laterales y bermas exteriores.

Los trabajos son más que visibles desde hace meses desde el Centro Comercial Los Alfares, inicio del proyecto que, según indican desde la Junta, está cumpliendo con los plazos. En estos días están paralizados por los problemas de la climatología, especialmente frío y heladas, que impiden avanzar en determinadas labores de las obras, pero que esperan retomar en breve continuando con la última fase.

El proyecto está más que avanzado, con todo el movimiento de tierras ya realizado, paso previo a la realización de las dos capas de asfalto, a la limpieza de la superficie y al pintado de las líneas de señalización de la que será la nueva vía.

Los trabajos pueden alargarse así hasta principios de verano, jugando con la prudencia y siempre pendientes de las condiciones climatológicas del invierno, aunque podrían adelantarse.

La ampliación de esta carretera es una demanda histórica de la ciudad que, si bien es un paso importante, no se completará hasta que se realicen dos tramos más para su completa finalización, al que se sumará la ampliación del puente del Alberche que, siguiendo el proyecto, también duplicará sus carriles.

Los trabajos ya en marcha son posibles tras la firma del convenio firmado en 2022 entre el consejero de Fomento, Nacho Hernando, y la entonces alcaldesa de Talavera, Tita García Élez, para la cesión de este tramo al Gobierno regional.

El segundo tramo, a partir del puente del Alberche, depende del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, de reciente creación tras la conformación de Gobierno y que ahora se enfrenta a un cambio casi total de su estructura, indica el delegado de la Junta. Es por ello que, a pesar de las «buenas perspectivas», el desdoblamiento puede retrasarse. En este caso, resta la firma de los convenios tras la rúbrica del protocolo firmado en septiembre de 2022 entre el presidente regional, García-Page y la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, -ya cesada-, junto a los alcaldes de Talavera de la Reina, Cazalegas y Pepino.  

El segundo tramo. Desdoblar el puente sobre el río Alberche conseguirá prácticamente la mitad de los 16 millones de euros que se destinarán al total de este proyecto, siendo además el principal escollo a salvar. La solución no es fácil pero ya está proyectada. El puente por el que en estos momentos transitan los vehículos, se 'doblará' con otro al lado. Los dos carriles del actual se reorganizarán en un único sentido, mientras que el nuevo que se construya al lado lo hará con otros dos carriles en el sentido contrario. Esta obra, de grandes dimensiones, supondrá unos 8 millones de euros.

También se añade la construcción de una rotonda al salir del puente en dirección a Talavera, petición de Pepino, que dará acceso a varias urbanizaciones, entre ellas la de Soto del Espinosillo.