Los ríos de España tienen que contar con nuevos planes de cuenca a partir de 2027. La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, explica que ya tienen los documentos iniciales y avisa de cómo pinta el panorama: "Todo es restricción, todo es prohibición".
Así lo ha avanzado esta mañana tras reunirse con la delegación de Asaja que va a viajar a Bruselas esta misma semana. "No sabemos muy bien qué va a suceder", comenta, "esa incertidumbre no hace posible que nuestros agricultores y ganaderos se formen en cómo adaptar sus cultivos o qué se necesita para atender la demanda de los ciudadanos que consumimos los alimentos que ellos producen".
En Castilla-La Mancha coinciden siete confederaciones: Tajo, Guadiana, Júcar, Segura, Guadalquivir, Duero y Ebro. "Todas cortadas por el mismo patrón", comenta Gómez, "los documentos iniciales son comunes prácticamente para todas ellas". La consejera alerta de que "las medidas restrictivas afectan a todas por igual". Y añade que "no solo afecta a los que ya tienen concesiones, sino los que aspiran a tenerlas". Reconoce que un agricultor, como "es lícito y lógico" aspira a tener unas mejores concesiones de agua para regadío.
Con todo, también asume el contexto de Cambio Climático que hay que tener en cuenta. "Hoy hace un sol maravilloso y tendría que estar lloviendo o nevando", expone, "desgraciadamente eso no es así y lo que puede parecer buen tiempo para los ciudadanos de una ciudad es mal tiempo para el medio rural".
Esta semana y la que viene ya habrá reuniones de las demarcaciones hidrográficas para dar el pistoletazo de salida al trabajo de la futura planificación. "Lo único que hacen es informar un poco de lo que esperan, pero realmente, como son documentos iniciales, no desvelan todo lo que se va a hacer", apunta la consejera.