Reconocimiento a la inclusión y la lucha de Apanas

A. L. Ramos
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El Ayuntamiento de Toledo dedica la plaza del Horno de la Magdalena a la Asociación Provincial de Padres de Personas con Discapacidad Intelectual

La plaza del Horno de la Magdalena se dedicará a Apanas. - Foto: David Pérez

En el marco del sesenta aniversario de la Asociación Provincial de Padres de Personas con Discapacidad Intelectual de Toledo (Apanas), la entidad recibe un reconocimiento simbólico y profundo. La plaza de la Magdalena, en pleno corazón de Toledo, será dedicada a la asociación que durante más de seis décadas ha trabajado incansablemente por la inclusión y la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual y sus familias.

María del Mar Azaña, presidenta de Apanas, destaca que la dedicación de la plaza de la Magdalena es un acto de visibilización que no solo honra la trayectoria de la entidad, sino que también refleja un paso importante hacia la plena inclusión de las personas con discapacidad en la sociedad.

La historia de Apanas comenzó en 1965, cuando un grupo de padres y madres decidió reunirse para dar respuesta a la situación de sus hijos, quienes no encontraban los recursos ni el apoyo adecuado en la sociedad. «En ese momento, no había nada, nada para atender a las personas con discapacidad. Fue un grupo reducido de familias las que se reunieron en el salón de actos de la Casa Sindical de Toledo para empezar a buscar soluciones», recuerda María del Mar. En aquel entonces, la discapacidad intelectual era un tema poco comprendido y, en muchos casos, invisibilizado.

Desde sus inicios, la asociación se fue consolidando poco a poco, creando servicios y centros de atención para las personas con discapacidad a lo largo de toda la provincia de Toledo. Hoy en día, Apanas cuenta con diecinueve centros y servicios, que van desde la atención temprana hasta los servicios residenciales para personas adultas. Este desarrollo ha sido clave para ofrecer un acompañamiento integral a lo largo de toda la vida de las personas con discapacidad intelectual.

A pesar de los avances logrados, María del Mar reconoce que aún queda mucho por hacer en términos de inclusión plena. «La evolución ha sido positiva, sin duda, pero no hemos llegado a la meta. Todavía hoy, las personas con discapacidad siguen siendo miradas de manera rara en algunos casos, y eso tiene que cambiar», señala. Para ella, la verdadera inclusión implica que las personas con discapacidad puedan participar en todas las actividades cotidianas: ir al cine, tomar un café con amigos, tener un empleo y, en definitiva, vivir de manera independiente si así lo desean y pueden.

VISIBILIDAD IMPORTANTE. «Lo fundamental es que las personas con discapacidad puedan hacer lo mismo que el resto de la sociedad, con los apoyos necesarios, por supuesto. No se trata de apartarlos, sino de incluirlos en todas las áreas de la vida cotidiana», subraya María del Mar.

La dedicación de la plaza de la Magdalena a Apanas representa un paso importante en la visibilización del trabajo de la asociación y de las personas con discapacidad intelectual en general. «Es un honor enorme que una de las plazas más importantes de Toledo, después de la Plaza de Zocodover, lleve el nombre de Apanas. Para nosotros, como asociación, pero también como familias, es un orgullo», expresa la presidenta.

Este reconocimiento no solo tiene un valor simbólico, sino que también permitirá a muchas personas, tanto locales como visitantes, conocer la historia y el trabajo de Apanas. «La plaza de la Magdalena está en pleno centro de Toledo, un lugar muy transitado. Muchas personas se preguntarán qué es Apanas, qué hacemos y por qué estamos ahí. Este tipo de visibilidad es fundamental para dar a conocer nuestra labor y, sobre todo, para mostrar que las personas con discapacidad tienen un lugar en la sociedad», comenta María del Mar.