El alcabonero Gabriel de Loarte escribió el 26 de abril de 1577 en América una carta a Felipe II para informar del envío desde Panamá de una perla de gran tamaño y recién descubierta. «La mejor que jamás se extrajo en las Indias», vino a decir en ese mensaje, que repasaba entusiasmada más de 400 años después Esperanza Martín.
Esta historiadora del Arte revisaba entonces documentos de ese hombre de letras alcabonero del siglo XVI, una de las personalidades incluidas en el libro 'Alcabón. Una larga historia', una investigación sobre este municipio de la comarca de Torrijos compartida con Mariano Maroto y presentada el pasado día 9. El Ayuntamiento encargó en el año 2019 a estos dos especialistas una obra sobre el pasado, casi totalmente inédito, de este pequeño pueblo.
Los tres años de pesquisas han deparado descubrimientos extraordinarios como esa carta escrita por Gabriel de Loarte a Felipe II por la aparición de una perla conocida posteriormente como 'La Peregrina'. «Me hizo mucha ilusión. Es muy curioso», explica a este diario Esperanza.
La perla ‘La peregrina’ une a Alcabón y Liz Taylor Los autores explican en el libro que la extracción de la perla ocurrió en los bancos del Golfo de Panamá por la gente al servicio de Diego de Tebes y Brito, gentilhombre de la cámara del rey y alguacil mayor de la Audiencia de Panamá.
«Manera de pera que paresce ser en toda perficion que peso cinquenta y quattro quilates y tres granos», dice textualmente la carta de Loarte. La perla pasó finalmente a manos del rey Felipe II y se incorporó a las joyas vinculadas a la Corona española.
«Su tamaño y forma eran inusuales, siendo considerada una de las gemas más valiosas y legendarias de la historia, no sólo de España sino europea. Fue llamada La Peregrina por su singular hermosura, perfección y excelencia», detallan en el libro, cuyos ejemplares están ya a la venta en las oficinas del Ayuntamiento a un precio de 25 euros.
'La Peregrina' permaneció como parte del Tesoro Real de España hasta 1808. José Bonaparte expolió las joyas en un viaje trepidante que continuó en Estados Unidos. «En un claro acto de rapacidad sin escrúpulos», reprochan en libro el comportamiento del hermano mayor de Napoleón Bonaparte. La perla 'posó' supuestamente en retratos de Velázquez a las reinas Margarita de Austria e Isabel de Borbón y en el de Margarita de Austria de Juan Pantoja de la Cruz. Todos en el Museo del Prado.
Pero la pirueta más conocida ocurrió en los años 60 cuando el actor Richard Burton compró la joya como regalo a Liz Taylor. Una perla que ha seguido un viaje de cuyo nacimiento informó un alcabonero.