No sé si se han enterado, porque es posible que en su zona no haya habido cobertura durante, pongamos, seis años… pero parece que viene Mbappé y, ahora sí, es la buena. Archivo guion definitivo, guion bueno, guion versión cuatro, guion ahora sí, guion última prueba: «Kylian ya está aquí». Bueno, faltan algunos flecos (¿te imaginas que, al final, un fleco lo tuerce todo?), pero parece que de este año no pasa, que después de una de las operaciones de acoso y derribo más descomunales (la que más, pondría la mano en el fuego) en la historia, el astro francés jugará en el Santiago Bernabéu. 
Si se confirma, es una noticia estupenda para LaLiga, que la década pasada fue el epicentro del fútbol mundial gracias a una lucha colectiva Barça-Madrid gracias a la pugna individual Messi-Cristiano… pero que en la salida de los 'genios' quedó a los pies de los caballos: Inglaterra está a años luz, y competiciones pujantes como la Bundesliga han ido recortándonos terreno haciendo las cosas muy bien. Mucho mejor que nosotros. La llegada de Mbappé es algo magnífico, sin duda… pero, ¿va a haber competencia o va a ser un paseo militar del Real Madrid, tipo lo que hace el propio PSG por Francia? Porque el Madrid, con mil lesionados y sin el '7' de 'les bleus' en sus filas, es capaz de meterle cuatro al segundo clasificado del campeonato. Y si le añades a una 'bestia' del gol, lo normal es multiplicar por varios enteros la diferencia con el resto. Lo cual es muy bueno para el Real Madrid y, previsiblemente, malo para la competición por, vaya, falta de competencia. Porque esperar algo del Barcelona, un fichaje 'anti-Mbappé', es imposible a día de hoy: vive ahogado en sus dudas deportivas, sus apreturas económicas, su mala salud... Llega Kylian y, con él, años extraños.