Page recibe 22.500 firmas para acabar un centro de salud mental

Soraya Lucas / Toledo
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La Asociación Luz de la Mancha entregó ayer en la sede de la Presidencia, en Toledo, casi 22.500 firmas para continuar con las obras de la Residencia Comunitaria de Alcázar

La Asociación Luz de la Mancha volvió ayer a Toledo, concretamente al Palacio de Fuensalida -sede de la Presidencia de la Junta- a entregar casi 22.500 firmas para continuar con las obras de la Residencia Comunitaria para enfermos mentales en Alcázar de San Juan. El pasado año, la asociación vino a Toledo a entregar también firmas para la apertura de la planta de Salud Mental en el Hospital Mancha Centro, objetivo que se cumplió según expuso ayer el secretario de la asociación, Joaquín Arias.

De nuevo, los familiares y enfermos acuden a las puertas de Fuensalida a entregar al presidente de Castilla-La Mancha las firmas que han recogido durante meses en mercadillos, plazas, centros comerciales y otros establecimientos de 19 pueblos de la comarca Mancha centro. También han recabado el apoyo de los ciudadanos a través de internet y correos electrónicos.

La asociación solicita a García-Page y al consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, que se habilite una partida en los presupuestos de la Junta de 2016 que permita licitar las obras y reiniciar las mismas de la Residencia Comunitaria. Asimismo, piden que se aparte el dinero necesario para continuar con el «grueso» de las obras en 2017 y 2018, «con el fin de que empiece a admitir residentes -unos 42- en el segundo semestre de 2018 o en la primavera de 2019». En cualquier caso que finalicen las obras en la presente legislatura y sea García-Page «el que abra las puertas a las primeras personas con enfermedades mentales que van a residir en la misma», animó Arias. Hasta la fecha, las obras han costado a los contribuyentes 1,5 millones de euros, recordó el secretario de la asociación.

Atención a los casos más graves. En tanto en cuanto se solucione este problema, Arias pidió al Gobierno regional «una solución inmediata residencial para los casos más graves, que esperan una plaza como agua de mayo, no solo ellos sino también sus familiares, pues el ingreso en una residencia privada es inasumible para muchas familias por su alto coste».

También pidieron a los tres grupos parlamentarios de las Cortes que elaboren una iniciativa instando al Ejecutivo regional a modificar partidas en el presupuesto de 2016 para que «entre todos sean capaces de llevar a buen puerto este recurso tan necesario y más cuando las obras llevan paralizadas cinco años».