Cooperativas Agroalimentarias de Castilla-La Mancha ha considerado necesario "un relevo generacional" en el sector agroalimentario y cooperativo de la región, dado que el 35 por ciento de sus socios superan los 65 años de edad y solamente el 4% de las explotaciones tienen menos de 35 años .
Así lo ha manifestado a los periodistas, antes de inaugurar un campus de jóvenes cooperativistas en Toledo, el presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Castilla-La Mancha, Ángel Villafranca, que, por esta razón, ha considerado "prioritario" incorporar a jóvenes al mundo cooperativo "crearles ilusión, motivarlos e iniciarlos en una actividad que puede ser una alternativa perfectamente válida para su futuro profesional".
Éste es el objetivo del VII Campus de Jóvenes Cooperativistas de Castilla-La Mancha, que ha reunido a 55 jóvenes, a los que se pretende "formar y motivarlos, para que entre ellos se conozcan y cooperen", ha afirmado Villafranca.
También ha dicho que es "importante" que haya jóvenes de distintas zonas que la región para que puedan interactuar entre ellos y establecer un grupo de jóvenes que cojan el relevo y "den el salto" a la gestión de las cooperativas, en los Consejos Rectores y órganos de decisión.
Asimismo ha dicho que la digitalización "no es un futuro, sino que ya es una realidad" porque la nueva PAC contempla nuevas técnicas de cultivo o de elaboración, por lo que hay que integrar todo esto, teniendo en cuenta, por ejemplo, el contexto actual de sequía de este año.
Villafranca también ha asegurado que el rango de edad de jóvenes agricultores les gustaría que fuera de menos de 35 años y, si puede ser, que se puedan incorporar cuando terminen su formación, tanto en la Universidad como en las distintas ramas de la Formación Profesional.
El dirigente agrario ha atribuido la falta de relevo generacional en este sector a que "hay una manifiesta caída de la natalidad en la sociedad española, no en este momento, sino que se viene acumulando de años atrás", a lo que se suma que no es la actividad "más deseada".
En este sentido, ha dicho que la vida en el campo "no es fácil" y ha considerado que a los ciudadanos, en general, le gusta más vivir en una ciudad del siglo XXI, por lo que ha defendido que el trabajo de Cooperativas es facilitar que quienes apuesten por el mundo rural puedan compaginar sus derechos con esta vida, "que no tiene nada que ver con la de hace 50 o 60 años", ha remarcado.
Por su parte, el consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, ha destacado que el relevo generacional, la presencia de las mujeres en los órganos de decisión y la integración comercial de las empresas cooperativas "forman parte del núcleo duro del modelo agrario de Castilla-La Mancha, que es el de las explotaciones familiares".
Por ello, ha considerado "muy importante" coincidir en estas tres cuestiones básicas del modelo agrario regional con las cooperativas.