La tramitación burocrática previa a la construcción de cualquier infraestructura es larga y tediosa, pero si se trata de un cementerio, que se construye de siglo en siglo, ésta puede alargarse mucho más. El Ayuntamiento de Talavera se encuentra inmerso actualmente en este proceso y prefiere hacerlo despacio y ‘mirando con lupa’ para evitar fallos que en el futuro puedan suponer un ‘revés’ económico para las arcas municipales.

Por ello, los servicios jurídicos municipales han decidido que el plan de viabilidad presentado por la empresa Granitos y Mármoles Granero S.A, -firma que ha iniciado el expediente para la futura construcción y explotación del nuevo cementerio-, y donde se habían introducido los informes de los dos camposantos -el futuro y el actual- sea individual para el nuevo, que se ubicará en la carretera de Alcaudete a unos cuatro kilómetros de la ciudad. El por qué, según explica el concejal del área, Roberto González, reside en que quieren comprobar si el futuro camposanto «y su contrato de concesión de obra pública será viable por sí mismo» sin necesidad de contar con el actual, ubicado en el paseo del Cementerio.

Cambian así las cosas con respecto a las intenciones iniciales del Consistorio. En ellas, indicó González, se pretendía licitar la nueva necrópolis junto a la gestión de la antigua, «aunque los servicios jurídicos lo desaconsejaron». Por ello, ahora se estudiará  un servicio de gestión exclusivo para el actual que puede continuar como está en estos momentos, es decir, gestionado por el Consistorio. En este sentido, el edil encargado del área recuerda que en los últimos años, el cementerio ha supuesto un déficit de 840.000 euros entre 2007 y 2012.  

Así, de no ser viable por sí mismo que una empresa construya y gestione por los años acordados el futuro cementerio de Talavera, el Ayuntamiento debería elegir otra forma de explotación, para las que tienen varias opciones. Según explicó González, podría ampliarse el contrato de explotación del viejo cementerio, o estudiarse la gestión directa, es decir, el Ayuntamiento «construye y explota», o la indirecta, en la que el Consistorio lleva a cabo la construcción pero después saca a licitación la gestión futura de las instalaciones mediante un canon.

No obstante, el responsable municipal considera que la mejor opción es la que se está barajando desde que se han iniciado los trámites, es decir, que la empresa concesionaria del servicio lleve a cabo la construcción y posteriormente la explotación de la infraestructura.

Se retrasa la licitación. Este cambio en la tramitación obligará al Ayuntamiento a retrasar la licitación del proyecto del futuro cementerio municipal que en un principio iba a salir a concurso en el mes de agosto. Con esto, indicó el edil, los plazos se retrasan a septiembre u octubre, ya que antes hay que elaborar el plan de viabilidad individual y posteriormente sacarlo a información pública. No obstante, el pliego de condiciones «está bastante avanzado», indicó.

El proyecto del cementerio de Talavera se ubicará en una parcela municipal de 11 hectáreas a uno de los lados de la N-502 o carretera de Alcaudete y contará con una inversión cercana a los 13 millones de euros. El anteproyecto presentado por la empresa Granitos y Mármoles Granero S.A. contempla la construcción del complejo en cuatro fases, a realizar según lo requiera la necesidad y atendiendo a la gran superficie de la parcela ya que triplicaría el camposanto actual.

La primera fase de trabajos agruparía 1.500 unidades de enterramiento junto a algunos servicios esenciales como la capilla y el crematorio. No obstante, la propuesta no está definida del todo ya que el proyecto debe ser consensuado con los ciudadanos antes de salir a licitación.