La Diputación Provincial pone a disposición de la Guardia Civil seis viviendas para las familias afectadas por el desalojo previsto de la Comandancia de Toledo, como muestra de cooperación institucional y apoyo a los guardias civiles afectados.
En este sentido, la Diputación reafirma su compromiso con quienes garantizan la seguridad de la ciudadanía, y contribuye para que ningún agente y su familia se queden en una situación de incertidumbre por falta de alojamiento, según informó ayer en un comunicado la Diputación.
Por ello, la institución provincial ha registrado ante los órganos competentes de la Guardia Civil la disposición de los medios materiales a su alcance a la espera de recibir el consentimiento por parte del Ministerio de Interior o de la Delegación del Gobierno de España en Castilla-La Mancha.
La Diputación Provincial da respuesta así a una petición del Ayuntamiento de Toledo quien ha solicitado medios que contribuyan a colaborar con el Instituto Armado ante el desalojo de la Comandancia de la ciudad debido a las obras de reconstrucción por riesgo de derrumbe.
El desalojo de todo el cuartel se acomete en dos fases: una primera con mediados de febrero como fecha tope, y una segunda que tiene como límite el 30 de junio. En este último traslado está previsto que se movilicen otras 60 o 65 familias.
El presupuesto de la nueva Comandancia de Toledo alcanzará los 80 millones de euros. La finalización de la construcción se demorará cuatro años.