Castilla-La Mancha es este 2024 Región Europea del Deporte. En La Tribuna queremos contribuir también con nuestro granito de arena a la conmemoración de este año y por eso hemos contactado con una treintena de castellanomanchegos vinculados con el deporte para que nos cuenten desde dentro cómo es su mundo y qué lecciones podemos sacar de su experiencia. A lo largo de este mes de junio podrán leer cada día los testimonios de deportistas de élite, de los que están empezando y de los que acaban de dejarlo, de quienes han sido olímpicos o paralímpicos y de quienes lo serán en solo unas semanas en París, de quienes son entrenadores, directores deportivos, guías o incluso seleccionadores.

«El atletismo es uno de los deportes más igualitarios, estamos todos en la misma pista»

En pocos días Irene Sánchez-Escribano pondrá rumbo a Roma para competir en el Europeo de Atletismo, el último paso para confirmar su presencia en los Juegos Olímpicos de París. La atleta toledana de 3.000 metros obstáculos se muestra contenta con el trabajo realizado a lo largo del año, pero confiesa a La Tribuna que todo puede pasar hasta que no saltes la primera valla.

Empezó su carrera «en el cole» cuando en clase de Educación Física ganaba a los chicos en atletismo. Fue en ese preciso momento en el que, casualidades de la vida, su profesor se fijó en ella: «Era el entrenador del Club de Atletismo y me dijo que me apuntara». Practicó otros deportes «como el tenis», pero no le gustaron.

Una vez federada hizo «un grupito muy bueno» de compañeras, algunas priorizaron los estudios y otras, como es su caso, decidieron compaginarlo. Sánchez-Escribano revela que la Federación de Atletismo trata por igual a los competidores, tanto hombres como mujeres, dándoles la misma visibilidad y financiación: «El atletismo es uno de los deportes más igualitarios, estamos todos en la misma pista compitiendo».

Lleva desde 2016 dedicándose profesionalmente a este deporte, pero comenzó en los 1.500 metros lisos y cambió porque «no habría llegado a destacar» en esa modalidad. Pese a que no soñaba «con ser olímpica» la profesionalización fue «un punto de inflexión».

Marchó a Madrid para estudiar y entrenar en un centro de alto rendimiento. La atleta toledana manifiesta que el atletismo «ha cambiado» desde la primera vez que pisó una pista, sobre todo en la selección: «Antes en el equipo nacional había más piques. Ahora mismo no es así», y destaca el «buen rollo» entre competidores. Sánchez-Escribano valora la aptitud de los atletas de la región, quienes sobresalen en el combinado nacional. Hay federaciones, «como la catalana o la madrileña, que tienen mucho potencial» debido a la centralización de los recursos materiales. Las ayudas de la Junta de Castilla-La Mancha «son muy buenas y hay gran apoyo», en especial para frenar la dispersión del territorio.

Una lesión le apartó de vivir sus primeros Juegos Olímpicos en Tokio, esa fue su peor vivencia como deportista de élite. En 2015, consiguió su primer campeonato absoluto de España con una marca muy cercana a la que necesitaba para el Europeo. No dudó y corrió esa carrera «con mucha determinación».