Miguel Falcón admitió que «el juego tiene que ser diferente», pero se mostró «muy contento» con el triunfo cosechado en el Municipal de la Virgen frente al CP Villarrobledo. El técnico del CD Toledo repitió varias veces que «lo más importante era ganar». Y es que, cree que, por el rival y el contexto, «todo el mundo pensaba que había que ganar sin problemas, pero era un partido dificilísimo».
Además, aseguró que el césped no estaba en buenas condiciones, y que sus jugadores tuvieron que adaptarse a las condiciones. «Era un día para no cometer errores, y no lo hicieron; además, supieron sufrir», añadió el preparador toledano. Explicó que metió a Álvaro y a Mancebo por dentro para intentar tener juego, aunque es verdad que «fue muy complicado tener la pelota por cómo estaba la hierba; tienes que adaptarte a todo».
Preguntado por lo que resta de competición, Falcón prefiere no mirar más allá del siguiente partido, el que medirá a los verdes con el CD Manchego en el Salto del Caballo, el próximo domingo a las 17:00 horas. «Es tontería mirar más allá; vamos ahora a por el siguiente, sabiendo que todavía nos quedan por delante cinco finales», agregó.
Por lo demás, no dejó pasar la oportunidad de dar las gracias a los seguidores que se desplazaron hasta la localidad villarrobletana. «Son fundamentales, y apoyaron a los jugadores en los momentos complicados, así que es de agradecer», dijo Falcón, que insistió en la idea que ya repitió varias veces en la previa: «Ellos han ganado muchos partidos desde la grada, así que les necesitamos».
En lo personal, el técnico capitalino confesó que el triunfo fue «una liberación», después de una semana «muy complicada». Entiende que fue fruto del trabajo realizado por sus jugadores, «desde Yelco hasta Juan». Insistió en que «todos estuvieron bien, incluidos los cambios y los que se quedan fuera y no juegan».
Y es que, comentó Falcón que «ahora hay que interponer el objetivo del equipo, el ascenso, a los intereses personales y querer jugar». Eso le llevó a afirmar que «lo que importa ahora mismo es ser un equipo de verdad». Ve clave esa función de los que no participan: «Tienen que arropar a los compañeros que sí juegan».
Finalmente, se le preguntó por algunos aspectos de su fórmula, como la de encontrar los espacios por dentro. Indicó Falcón que «hay un trabajo de fondo de Alfredo, así que así es más fácil». No en vano, continuó, «no empezamos de cero, así que lo que hay que hacer es dar continuidad a ese trabajo con tus matices».