La concejala de Familia del Ayuntamiento de Toledo y una de las representantes del Partido Popular en la concentración contra la violencia de género, Marisol Illescas, tuvo este martes una oportunidad para condenar las palabras de su compañera de Gobierno Inés Cañizares, en las que en una entrevista a La Tribuna aseguraba que «nunca se sumaría a ninguna plataforma radical de locas que se pongan a dar voces y vayan insultando a la gente. Lo he dicho muchas veces, estoy en contra de la violencia y de la violencia contra las mujeres».
Sin embargo, decidió no hacerlo, quizás por no perjudicar la coalición de Gobierno que les une como bipartito. El caso es que cuando Marisol Illescas fue preguntada por los medios de comunicación por estas declaraciones, en un primer momento no se pronunció sobre las mismas escudándose sobre la polémica que ella misma y su compañera Loreto Molina vivieron en otro acto de condena a la violencia de género junto a la plataforma '8M Toledo'. Ya fue en la segunda pregunta sobre las palabras de la vicealcaldesa Inés Cañizares cuando la edil de Familia señaló que no podía hacer valoraciones sobre un partido político que no es el suyo, para terminar destacando «yo sé lo que piensa el mío, que es la más rotunda condena a la violencia de género».
Sobre las continuas reivindicaciones por la supresión de la concejalía de Igualdad que se le achacan al actual equipo de Gobierno, Illescas manifestó que «por mucho que se empeñen algunos sí que existen en esas políticas, sólo que con otro nombre, como ocurre en otras ciudades», poniendo de ejemplo a continuación el Ayuntamiento de Lugo con una alcaldesa socialista.