Diego Izco

TIEMPO MUERTO

Diego Izco

Periodista especializado en información deportiva


Modric, quédate

14/05/2024

Empiezan a extenderse por el Bernabéu esas sensaciones propias y exclusivas de cada final de curso y que tienen que ver con el vértigo. Son muchos los foros en los que, a pesar de la euforia por la Liga y el billete para la final de la Copa de Europa, asoman mensajes que dudan sobre la idoneidad del fichaje de Mbappé y el sobresfuerzo económico de su fichaje. Básicamente, los mensajes que les refiero se podrían escribir con este patrón común: «Más nos valdría emplear ese dinero en recambios de garantía para Modric y Kroos». Sí: el madridismo ya se despide de los dos tipos que han dado sentido y espíritu ganador al mediocampo durante una década. Y si eso no da vértigo, qué podría hacerlo… 
La ovación que Los Cármenes tributó al croata sonó a portazo, a salida por la puerta grande, a fin de etapa. «¡Modric, quédate!» fue uno de los cánticos que más sonó en la celebración del título blanco por las calles de Madrid. Y como siempre sucede en el fútbol, cuando suena 'lo evidente' sucede 'lo contrario'. Ejemplo: «Tenemos plena confianza en el entrenador» es, más o menos, la antesala del despido. Quiere seguir, aseguran, pero a nadie escapa (ni a él mismo) que arrancará el curso con 39 años, y que el Real Madrid no es un club al que le tiemble el pulso para despedir a sus mitos incluso en un mar de súplicas de la afición. Raúl o Casillas, incluso Del Bosque, Hierro o Ramos, no tuvieron precisamente salidas fáciles ni alfombras de flores en su adiós. 
«Ya veremos qué pasa» es la frase de Luka, similar a la de Kroos cada vez que le plantean su continuidad. Ese vértigo genera nervios y mariposas en el estómago del merengue medio, que antes que abrazar la llegada de Kylian el 'terrible' prefiere saber qué pasará con las camisetas que hoy llevan el '10' y el '8'. Antes de entrar, dejen salir.