El CD Toledo quiere ser primero. Obvio. Tendrá que seguir achuchando al Atlético Albacete, que no falla. Al que arrancó alguna duda fue al CD Villacañas, en un derbi provincial más verde que los lirios. No hubo otro equipo sobre el césped. Con una buena presión, los de Alfredo Santaelena se pusieron por delante, y supieron administrar la renta como un bloque. Enfrente, el equipo rojillo fue valiente y tuvo arrojo, pero no capacidad para inquietar a Dani Simón.
Se notó la agitación desde los primeros minutos. La gente pitó el primer fallo de Mazzocchi, en el minuto 4, pero la mejor de todas llegó instantes después, en un centro de Angelito desde la izquierda que remató Stevens a bocajarro. La tiró tan al centro que Manu Lucas repelió el tiro sin problemas.
Los verdes, es verdad, controlaron el encuentro desde la posesión, y tuvieron llegadas de manera más o menos asidua. Salvo la ocasión de Stevens, el CD Villacañas no sufrió, todo hay que decirlo. Con los minutos, fue ganando metros, se fue desplegando hacia adelante, pero se le hizo muy grande el campo.
El encuentro se disputó en una mañana soleada en el Salto del CaballoPor lo demás, no estaban pasando cosas. Y eso, ¿a quién le favorece? Está claro, al que no necesita ganar. El caso es que, en los robos, el CD Toledo generó algo de peligro. Una llegada por la derecha, en el minuto 31, la acabó rematando el que siempre lo intenta. Mauri se sacó un derechazo que impresionó a la grada, pero no al marcador.
Se notaba quién tenía más ganas, eso no se puede negar, pero los recursos... El Villacañas también tuvo los suyos. Intentó combinar, probó con balones largos a Rubén Moreno... El caso es que el derbi ahí seguía, con el tapón puesto. El ambiente, engrandecido por la afición visitante, estaba por encima de lo futbolístico. Algo esperado.
Yes que, no era necesario correr riesgos. Si eso, para más adelante. El público no tiene mucha paciencia (de fábrica), pero cuando vio a sus futbolistas monear, ya comenzaron a aflorar los pitos. A Kofi le llegó un balón franco en el costado derecho. Tenía todo a favor, pero se lo pensó tanto, que a los visitantes les dio tiempo armarse atrás. Al final, tuvo que lanzar Rodri desde lejos para acabar jugada. Nada convincente. El tiro le salió muy alto.
El encuentro se disputó en una mañana soleada en el Salto del CaballoLos de Fernando Lominchar robaron en muchas ocasiones en el medio campo, con capacidad para poder montar contragolpes. El Toledo tenía un nivel de atención bastante alto atrás, pero, otras veces, faltó un buen pase o, quizás, creerse que era posible mirarle a la cara a Dani Simón. Le estaba faltando eso a los rojillos.
El CD Toledo, por su parte, estaba dando muestras de hincar el colmillo. Cerca del descanso, Stevens se quedó solo por el lado derecho, y optó por poner el balón al centro del área. Pasaba Kofi por ahí, pero no enganchó un remate. Encima, Mazzocchi luego no controló el rebote. Estaba en una situación inmejorable.
Al final, después de muchas muchas jornadas, el Toledo marcó en un saque de esquina. El Villacañas en pleno reclamó mano del atacante argentino. Puede ser, porque el balón le quedó muerto delante. ¿Involuntaria? Probablemente. Pero mano.
El encuentro se disputó en una mañana soleada en el Salto del CaballoLa primera mitad no dio para más. Lominchar hizo una permuta en el descanso, al dar entrada a Óscar Guijarro por Antonio Moreno. Quiso mandar el Villacañas. El Toledo presionó alto. No le dejó salir de su terreno de juego. Casi sin quererlo, a Kupen le salió un pase a Mauri, entrando en el área. El remate del brasileño salió por encima de la portería.
Estaba asfixiado el equipo visitante. No encontraba la forma de irse hacia adelante. Y quería. Los de verde estaban cómodos en este rol. Cualquier salida les servía para levantar los aplausos de su público. Rubén Moreno estuvo cerca de cazar un centro desde la izquierda. Se le adelantó Luna.
Era ya el minuto 60, y Alfredo Santaelena estaba preparando sus dos primeros cambios: Óscar y Álvaro. Mancebo se meetió para adentro, en la mediapunta, y suya fue la siguiente gran ocasión del CD Toledo, con un tiro con la izquierda que repelió Manu Lucas.
El encuentro se disputó en una mañana soleada en el Salto del CaballoLa trinchera planteada le estaba dando frutos. La impotencia podía carcomer a un Villacañas que podía tener una en cualquier momento. Lominchar acudió a un triple cambio para buscar soluciones: Erike Lescano, Tete Vacas e Iker Muñoz. Justo a continuación, el encuentro se desequilibró todavía más con una acción por el costado derecho que remachó Álvaro por el otro lado.
Faltaba algo más de un cuarto de hora. El CD Toledo pudo redondear la mañana en varias ocasiones. Kofi se plantó solo ante Manu Lucas. Ganó el portero. Después, Mancebo se topó con el larguero tras una cesión de Chupi. Se barruntaba, y el propio Mancebo, omnipresente, centró desde la izquierda, y Quereda, sin querer, se metió el tercer tanto.
Alfredo agotó los cambios, con Iker García y Manu Gavilán. Estaba todo resuelto. El Villacañas mantuvo su forma de intentarlo, con la posesión, queriendo llegar. Los locales habían relajado su presión, pero apenas concedieron nada.